Seguimos con la convertibilidad. Esta vez del Profesor Julio Rougès, un comentarista de lujo del blog. No se lo pierdan:
En gran medida –aunque no exclusivamente- por prejuicios ideológicos, en nuestro país la convertibilidad es, a la fecha la “bette noire” para una proporción considerable de la opinión pública, que parece haber olvidado que masivamente la apoyaba hasta fines del año 2001 (incluso la Alianza que llegó al poder en el año 1999, proclamando en su “Carta a los argentinos” que no sería tocada). A ese cambio de parecer no son ajenos ciertos formadores de opinión –la mayoría, con una pobre cultura económica y general- que la han demonizado.
Quienes piensan que es una construcción exótica, ignoran u olvidan que un tipo especial de convertibilidad, el patrón oro –con las cajas de conversión- rigió durante gran parte de los siglos XIX y XX en la mayor parte de las economías de Occidente, incluso Argentina. Una caja de conversión se caracteriza por garantizar la convertibilidad de una moneda en términos de oro, o de la moneda más fuerte de otro país u otros países.
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Para que la convertibilidad se mantenga es indispensable una gran cuota de confianza en el la continuidad y en las instituciones. Porque a la menor duda (como ocurrió aquí), la gante entra en pánico y se lanza a convertir sus pesos en dólares en forma masiva y se pudre todo como ocurrió. para que la convertibilidd se mantenga es indispensable seriedad de la clase política y confianza sostenida todo durante muchos años http://beta.blogger.com/profile/00358735547387048830 horacio
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