Siguen las agachadas de Francia. Muy impresionante.
Me imagino que alguien todavía se acuerda de los disturbios en Francia en 2005, en las que activistas musulmanes de ese país se enfrentaron con la policía durante varias semanas con decenas de muertos y heridos y centenares de autos incendiados. El desencadenante fue la muerte de dos “jóvenes” electrocutados al ingresar por la fuerza a una estación eléctrica escapando de la policía.
Aunque parezca mentira, ahora el gobierno francés convirtió a esa planta de electricidad en Clichy-sous-Bois en un momento en homenaje a estas dos bellísimas personas. Como no podía ser de otra manera, Ségolène Royal, la candidata socialista, fue a dejarles una corona y hablar con los padres.
Me pregunto qué tiene que pasar, cuanta gente tiene que morir, para que una sociedad reaccione y empiecen a funcionar los mecanismos de supervivencia. ¿Realmente creen que bajándose los pantalones van a conseguir posponer el momento en que los pasen a degüello?
(Enviado por Liberty Bell)
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