Lo que se dice una merde

Ayer me pasé otras cinco horas en la urgencia del hospital, perdón que siga con el tema, desde las doce y media a las cinco y media de la tarde. Dos días seguidos. A pesar de ir con un turno previo para un estudio especifico, los tipos te hacen pasar por la guardia. No me queda claro para qué se usa el resto del hospital.

Aparentemente existe un consenso generalizado entre pacientes y personal de la salud, o entre víctimas y victimarios, de que el tiempo de los pacientes es descartable, no tiene valor. La gente está para eso, para esperar indefinidamente que alguien los atienda, ese es su rol social.

Es cierto que faltan médicos y enfermeras pero no hay que ser un experto en administración médica para darse cuenta de la falta de organización que impera. Todo el mundo corre como pollo sin cabeza de un lado para el otro, tratando de apagar incendios o de meter el dedo en la filtración para evitar que se hunda el barco.

Tengo las pelotas por el piso, como se dice en francés.