El Opinador Compulsivo

En una de las versiones de la propaganda, 1200 personas se reúnen en la calle, a la entrada del edificio de una tabacalera, y se arrojan al piso coordinadamente haciéndose los muertos. Uno de los activistas levanta un cartel que dice, en inglés, que el tabaco mata a 1200 personas por día y los invita a tomarse un día libre.

En la otra versión, en lugar de supuestos cadáveres, cubren la calle con 1200 bolsas para cadáveres, de las que se usan en las morgues.

Son producidas por alguna ONG y las dan a cada rato en televisión. Aparentemente sus creadores están convencidos de que son extremadamente ocurrentes y efectivas. Yo creo que son un excelente ejemplo de corrección política y demagogia. La culpa de mis problemas siempre la tienen los demás, especialmente las “grandes corporaciones”. Si soy gordo, la culpa es de McDonalds, BK, Wendy’s y la sociedad “comida chatarra”; si fumo, la culpa es de las tabacaleras y la sociedad de consumo que fomenta el cigarrillo.

Nunca fumé, aborrezco el tabaco y honestamente no me caen para nada simpáticas las tabacaleras. Pero me pregunto si alguien siquiera se planteó aquello de la responsabilidad individual.

Que yo sepa, nada ni nadie nos obliga a fumar. De hecho, la mayoría no lo hace. Como ya comenté antes por acá, mi padre solía fumar cuatro paquetes de Parisiennes por día. Mi hermano se convirtió en fumador, yo no.

¿Podemos honestamente decir que si alguien fuma es culpa de las tabacaleras? ¿Acaso somos unos pobres animalitos indefensos que hacemos lo que nos dicen que debemos hacer?