Muy interesante trabajo que refuerza lo que no me canso de repetir por acá: la raíz de nuestros problemas y carencias es fundamentalmente cultural y está relacionada con nuestro sistema de valores; como hicieron en su momento países como España o Chile, es necesario alcanzar cuanto antes un consenso de mínima que eleve el piso de racionalidad sobre el que nos movemos como sociedad:
- El excepcional desarrollo que experimentó la Argentina en los noventa años que van desde el día en que Urquiza venció a Rosas en Caseros (3 de febrero de 1852) hasta la fecha en que Roberto M. Ortiz, ciego y diabético, debe resignadamente delegar el poder en Ramón Castillo (3 de julio de 1940) – desarrollo que permitió al país colocarse en el grupo de lnaciones de vanguardia – contrasta con el notable retraso relativo que ha sufrido el país desde entonces hasta el presente.
- La hipótesis de este trabajo – derivada del estudio de la historia – es que la sociedad argentina posee algunos rasgos culturales o instintos contrarios al desarrollo, tales como una profunda desconfianza hacia el mundo exterior y un escaso apego por las reglas y las instituciones.
- La hipótesis continúa afirmando que, contrariamente a lo ocurrido en la segunda mitad del siglo XX, entre 1852 y 1940 la Argentina contó con el liderazgo de hombres que, aún estando plenos de carencias y defectos, supieron llevar a la Nación por caminos opuestos a los que dictaban aquellos instintos o rasgos socioculturales contrarios al desarrollo.
- Vulnerando muchos principios e instituciones, pero adhiriendo o respetando un conjunto mínimo de ideas fundamentales (la independencia de la Corte Suprema y el período presidencial constitucional de seis años, como opuestos a la incultura política prevaleciente; el acoplamiento de la Argentina al mundo, como opuesto a cierta xenofobia instintiva y el respeto por el crédito público, como opuesto a la incultura crediticia general), estos líderes instaron y/o impulsaron a la sociedad a contrariar y superar algunos de sus rasgos culturales más negativos
- La historia parecería también demostrar que la inversión en educación, si bien altamente deseable desde un punto de vista social y rentable desde un punto de vista económico, no fue suficiente para modificar los rasgos culturales e instintos contrarios al crecimiento que caracterizan a la sociedad.
- Tras una fuerte inversión durantes varias décadas, hacia mediados del siglo XX el sistema educativo masivo del país era reconocidamente excelente, habiendo la educación resultante ayudado a mejorar la calidad de vida, las condiciones de convivencia y la aptitud laboral de la población.
- La hipótesis concluye sosteniendo que a partir de 1940, cuando los liderazgos dejan de ser “superadores” (o sea, contrarios a los rasgos culturales que inhiben el desarrollo) y se tornan “demagógicos” (o sea, “favorables” a tales rasgos), ni el sistema educativo de excelencia, ni la educación acumulada tras siete décadas de inversión, pudieron impedir el fracaso o el retraso social del que hemos sido testigos.
- No es el de Argentina el único caso de una sociedad que después de un largo de período de desarrollo, fracasa o involuciona por defección de su liderazgo. En la primera mitad del siglo XX Alemania y España son dos ejemplos de sociedades que sufrieron el colapso de sus clases dirigentes. Ambas sin embargo, pudieron reconstruir sus liderazgos políticos y resurgir.
- En nuestro caso, la experiencia histórica de 1852 a 1940 sugeriría que a la dirigencia le bastaría consensuar muy pocos, aunque fundamentales, principios (ver el cuarto párrafo de este resumen) para lograr grandes beneficios.
- ¿Existe la suerte o el azar en la historia de las naciones? Sea cual fuere la respuesta a este interrogante, lo cierto es que no se puede dejar de trabajar para mejorar la calidad de los liderazgos.
A mi me cuesta creer que una persona en su sano juicio y con buena predisposición no lo comprenda. No lo entiendo ( ... ¿eso será intolerancia de mi parte?)
ReplyDeleteVíctor, me temo que no se trata de una cuestión racional.
ReplyDeleteEn buena medida el éxito de la Argenina Rampante del anterior cambio de siglo fue consecuencia de las circunstancias del mundo, que compraba los productos que el azar nos dio, lo cual nos hizo suficentemente ricos como para disimular las inmundicias de los gobernante. El hecho de que las instituciones tuvieran mayor vigencia y entidad debe haber contribuido, pero es por completo ingenuo considerarlo la verdadera causa de aquel éxito.
ReplyDeleteEn buena medida el fracaso de la Argentina Decadente del último cambio de siglo fue consecuencia del boicot económico político orquestado por los EEUU a nuestro país, como consecuencia de la neutralidad argentina en la Segunda Guerra Mundial. Este boicot no sólo es la mejor explicación de las calamidades de nuestra economía, sino también de la degradación de nuestras instituciones, fomentada maquiavélicamente por el Foreign Office norteamericano. Esto ha sido suficientemente registrado y documentado a partir de la relativamente reciente desclasificación de documentos el Estado norteamericano, y no puede ser tachado de "teoría conspirativa paranoica".
En consecuencia, creo que el texto presentado omite elementos fundamentales de la Historia que permiten acercarse a un mejor entendimiento de nuestra triste actualidad, y se sigue "endrogando" con los mismos "argumentos dormitivos" regastados de mi abuela.
Saludos.
Pero por supuesto, Figurín, la culpa de los problemas argentinos la tiene EEUU. Y antes los ingleses.
ReplyDeleteFigurín: Argentina no era neutra en la WWII, ERA PRO-NAZI.
ReplyDeletePero como eran tan cagones y corruptos los perucas que prefirieron la neutralidad como "negocio" antes que tomar partido por un bando que sacrificó miles de vidas para liberar de una horda de asesinos que asolaban en Europa y en Asia.
Y por supuesto, hubo Argentinos quienes fueron por su cuenta a pelear contra el partido ario que inspiró la doctrina de tu ídolo "pito-corto".
De esto último hay un post tuyo Luis...
Saludos.
Albert, ver por ejemplo esto. De todos modos, no tiene sentido, no te gastes, lo de Figurín y tanta otra gente es una especie de enfermedad mental.
ReplyDeleteEs éste Luis :-)
ReplyDeleteSos Grosso... Sabelo ¿eh? !!!
Ciao
Gracias, Albert. Groso por la panza debe ser :-)
ReplyDelete(Un poco extemporaneo lo mio) Figurín:Argentina eligió solita ponerse frente a USA (por lo menos sus gobernantes de ese momento) No existió una conspiración programada como denuncias. Nosotros le mojamos la oreja y después nos quejamos porque no nos ayudan !?!? por favor!!! Hay una anécdota que cuenta que en una oportunidad, el canciller de EEUU se olvido el sombrero en el despacho del Coronel Perón y se lo devolvieron unos días después todo roto y pisoteado. Que grande el Pocho !!! no? Eso termino en la perdida de muchos negocios muy buenos para la Argentina (en otras palabras significaría mejor calidad de vida de los argentinos; que de eso se trata … ria si fuera un gobierno bien intencionado)
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