Vuelve Fernando Fernández, nuestro hombre en Rosario, para reafirmar aquello de que la inseguridad es un invento de la oposición.
Debemos sentirnos orgullosos, estamos concretando nuestro destino latinoamericano, en Lima, Quito y Caracas hace generaciones que se vive de esa manera:
Ayer al mediodía, antes de partir para la facultad, miro por la ventana de mi departamento y veo una señora que viene con el pómulo roto, sangrando y el ojo negro. Le habían robado y como se resistió le habían golpeado con un objeto no punzante (no sé exactamente qué era).
Últimamente están robando cada vez más cerca de los policías y los de seguridad privada. Como si les estuvieran perdiendo el respeto o el miedo. Se está haciendo habitual escuchar tiros al aire que hace el policía para disuadir a un delincuente.
A su vez, los vecinos tienen sus propias estrategias de seguridad: salir en grupos, mochilas para adelante, carteras bien agarradas, manos libres por si hay que forcejear. Sin duda, el destacado de la cuadra es un vecino mío, contador, que sale con un hacha bajo el brazo. Sí, con un hacha. Con menor dramatismo, mi madre solía salir con una trincheta en la mano, que alguna vez le sirvió.
Los robos se están tornando más frecuentes y violentos. Dios no quiera, pero a este paso, algún día alguien va a hacer una estupidez, alguien va a morir y las cosas se van a poner feas enserio.
Luis: Ya se pusieron feas. Partiendo del garantismo que le da virtualmente "luz verde" ó "puerta giratoria" a la delincuencia, y la campaña gubernamental masiva contra la tenencia y uso de armas de fuego.
ReplyDeleteAhora están revisando esa ley de mierda (la de Escudero/perceval) sobre armas, que comienza diciendo:
"establécese el principio de prohibición". Todo a fin de reemplazar la otra mierda de la ley 20.429 Estamos en el horno? Si
¡¡¡La idea del hacha es fantástica!!!
ReplyDeleteEn primer lugar, no se necesita permiso para portar hacha. En segundo, hay hachas de variadas formas y tamaños: de doble filo, de filo simple y grandote y, para la cartera de la dama o el cinturón del caballero, las pequeñas tipo camping o el importado Tomahawk que hacía las delicias de los Irokeses.
Last but not least, en nuestra cultura moderna existe un generalizado temor hacia el arma blanca por lo que suele ser un buen disuasivo portar una a la vista y un buen hacha viene a ser el equivalente de la escopeta entre las armas blancas.
Hablando en serio, el Sr. del hacha se está buscando comerse un balazo de 9mm disparado por alguien que sabe que, desde que se inventó la pólvora, se acabaron los guapos.
¿Y si los chorros lo imitan y salen con hachas también? ¿Vamos a tener una batalla entre daneses y sajones, pero rosarinos?
Realmente, ¿la gente está tan desesperada e insensata que pueda llegar a estos extremos rayanos con el disparate?
Aclaro que no quiero faltarle el respeto a nadie, pero me cuesta creer que no haya caminos más civilizados y eficaces para poner en práctica y exigir mejoras en la seguridad pública.
Será que no vivo en nuestro, pese a todo, muy querido país y no aprecio la magnitud del desastre.
YO (el enmascarado)
¿No haya caminos más civilizados y eficaces para poner en práctica y exigir mejoras en la seguridad pública?
ReplyDelete¡Claro que sí!
Súper Margarita and the Landscapers.