OK, esto es simple. Con una fracción del dinero que van a "invertir" en el tren bala, las autoridades (esto siempre deben solucionarlo "las autoridades") pueden poner un tren lindo y limpio para los cartoneros. O tal vez le agregan un vagón de cola al tren bala donde los cartoneros se cuelguen con chiquillos, mujeres (¿¿¿22 años y cuatro hijos???) y cartones.
Cuando hace ya unos años Malasia anunció que inauguraba los edificios más altos del planeta (Petronas Towers) en Kuala Lumpur, recuerdo a varios americanos que sólo sonreían: lindas y altas las dos torres, en medio de una ciudad con millas y millas de "slums" o barriadas. En vez de ir por verdadero desarrollo (y verdadera democracia), Malasia optó, de la mano de su autoritario y musulmán líder, por proyectos que capturan fotos de diarios y un rol protagónico en películas como Entrapment, con Sean Connery. Hoy, Malasia tiene más pobres que hace quince años, el estado subsidia a grupos raciales, creando dependencia y lealtad política, y sigue con los proyectos Nacionales y Dignos, como el auto malayo, Protón, ya mencionado en este blog. Y las torres estaban, según una nota que leí hace un año, 30% desocupadas: la inversión de construirlas aún no se recupera. A veces me pregunto si Malasia, vecina del pequeño gran Singapur, no está en el continente equivocado. Ubicadita entre Uruguay, Argentina y Paraguay creo que estaría bien cómoda. Claro, cuando Argentina construya la torre más alta del mundo en Buenos Aires inmediatamente después de inaugurar el tren bala, las torres de Petronas van a tener competencia.
Dejándose de bromas, es interesante ver cómo la mayoría de los lectores que opinaron en La Nación y los entrevistados en la nota piensan que "el gobierno" debe hacer algo. Supongo que el gobierno debe proveer trabajo, casa, comida, transporte... todo, en fin. Es lindo ver que los gobiernos latinoamericanos gozan de tanta fe de parte de sus pueblos, los mismos pueblos a los que "el gobierno" ha jodido por 200 años.
Sergio
¿Qué pasa que el gobierno no hace nada?
ReplyDeleteMahathir, Kichner y Chávez, un solo corazón.