Roberto Cachanosky nos recuerda una vez más que esta vez seguro que sale bien:
El gobierno ha caída en trampa del largo plazo. Para recomponer la rentabilidad de las empresas y estimularlas a invertir, además de otorgarles seguridad en las reglas de juego y en el abastecimiento de energía, deberá mover el tipo de cambio hacia niveles más altos. La pregunta es: ¿con qué recursos? Hasta ahora ha recurrido a la expansión monetaria y el endeudamiento, generando un caos inflacionario, agravado por el primitivismo de las medidas del secretario Moreno. Lo que debería conseguir el gobierno es un fenomenal superávit fiscal, por lo menos equivalente al superávit de balance comercial y rezar para que no ingresen capitales (algo contradictorio si se quiere crecer). Dicho en otras palabras, la mejor noticia que podría tener el gobierno sería que las exportaciones crezcan menos que las importaciones para tener que comprar menos dólares, con lo cual estaríamos en la curiosa situación que el modelo de sustitución de importaciones que impulsa empezaría a jugarle en contra.
Pero aún así necesitaría generar más superávit fiscal que el actual y para ello debería bajar el gasto público, lo cual conspira con el objetivo de poder del gobierno.
y ya que hablamos de modelos, es cierto que albertito fernandez se está manducando a araceli?
ReplyDeleteMe extraña, Guillermo, el farandulismo terminó con Menem.
ReplyDeleteQué gracioso, bajar el gasto público. ¿Y cuál es entonces la gracia de tener el poder?
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