Pocho, hacete un lao que viene el tren bala...

De Thompson, por email:

Muchachos!
Sorry que los tengo tan descuidados. Los viajes al interior de la provincia tucumana me tienen tan ajetreao que ni les cuento. No se preocupen, nunca dejo de meterme a un cíber (sí, escucharon bien. El pueblo puede tener 12 habitantes, media vendedora de bollos, ni una casa de material, ni una calle con el pavimento, pero lo que indefectiblemente vas a encontrar es: 1) un cíber; 2) un boliche que tiene un cartel: "Drugstore", 3) tres antenas satelitales de DirectTV por habitante. No si la globalización ésta, no te digo mirá) para ver que ganzadas andan diciendo. Eso no puede faltar en mi rutina.

Acá les mando una foto que dentro de un año va a ser reliquia, miren. Guardenla bien bajo llave, que ahora que se viene el tren bala vas a tener que ir a mercadolibre.com para poder ver un sulky en la calle. El Simoca Times se pregunta hoy en su página editorial:

"Qué viene después? Una línea de subterráneos en Simoca? Un rascacielos en Choromoro? Una parade del orgullo gay en Amaicha? Adónde quedó la Dignidad que nos prometieron?"

Te cuento quiénes están de parabienes con la llegada del tren de alta velocidad: los treinta mil caballos que circulan las calles céntricas en Tucumán. Se lo puede ver juntando firmas de apoyo al proyecto de los Ceausescu patagónicos. Finalmente van a poder jubilarse los laboriosos equinos.