Bueno, sirvió para algo. Debo admitir que anoche no me puso triste ver perder a Argentina contra Chile. El loco Bielsa es uno de mis argentinos favoritos, siempre lo fue. Y Basile me pareció siempre un DESASTRE. Me alegra que se cierre este capítulo. Veamos que trae el nuevo.
Qué carucha!!
ReplyDeleteque vuelva carlos
ReplyDeleteHay algo que reconocer, no te dan la dirección técnica de la selección de fútbol sólo por ser una cara bonita.
ReplyDeleteDe escabio somos.
ReplyDeleteAndrés
Mi país no sirve para el fútbol y ya lo he dicho antes. El sólo hecho de ganarle a Argentina, que es potencia a nivel mundial en fútbol, demuestra lo cagones que somos de verdad: todos los diarios, todas las radios, todos los canales, todos los huevones habidos y por haber opinando de los marvafantasperfectonómicos que somos para patear una pelota porque le ganamos una vez en cien encuentros a unos que sí saben. Me da vergüenza. Lindo el triunfo, banderitas, Chi-Chi-Chi le-le-le, salgan del estadio, por suerte no hubo mayores destrozos (los jóvenes combatientes se agarran de todas para cagarse en la propiedad ajena) y listo, que se termine, hagan otra cosa, produzcan. Pero no. Lo que me cacheteó las gónadas fue que entrevistaran a Bachelet por el partido de fútbol. Qué nivel de mediocridad! La presidente del país debe estar para otras cosas. Si quiere dar entrevistas o brindar una recepción, que sea a los chilenos destacados en ciencia (...), a los más notables profesores (...), a los chilenos que en los últimos años se han distinguido en medicina (...)
ReplyDeleteY el silencio es aplastante.
Minas ricas, Argentina
Fútbol, Argentina.
Carne, Argentina (aunque ya mencioné a las minas ricas).
Estos triunfos deportivos me molestan por el uso ahuevonante que se hace de ellos. Y me molestarían aunque fueran seguidos. Sólo distraen la perdiz de lo verdaderamente importante para el país.
Sergio
Hay una cosa, Sergio, no estoy seguro de esto pero quizás sean mejores los triunfos, empates y derrotas en un estadio de fútbol, que no cambian nada, antes que las guerras por pedazos de hielo.
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