¡Arrrrrriba ese ánimo!
Con la victoria de Obama nos espera un futuro brillante.
Atrás quedaron los atentados terroristas, producto del odio que generaba EEUU en el mundo. Ahora todos los países del planeta amarán, admirarán y respetarán profundamente a los norteamericanos y su gobierno.
La crisis financiera es cosa del pasado, producto de los 8 años de administración republicana. En cuanto asuma Obama volverá el crédito, subirá la bolsa y la gente sin historial crediticio tendrá otra vez la oportunidad de comprar casas que no pueden pagar.
¿Conflicto en Medio Oriente? Por favor, cosa del pasado. Árabes e israelíes vivirán en armonía y se estrenará en los cines del mundo la coproducción palestino-israelí de La Sonrisa de Mamá.
No sé qué pasará con el precio del petróleo, pero no tiene ninguna importancia. El mundo comenzará a generar energía no contaminante, ilimitada y prácticamente gratis a partir del agua.
¿Calentamiento global? No me hagan reír. A pocas semanas de asumir, en una ceremonia en los jardines de la Casa Blanca transmitida en directo a todo el mundo, Obama ordenará al planeta Tierra que deje de joder con la temperatura.
¿Sobrepoblación? Nada de eso. Se establecerán las primeras colonias humanas en la luna, Marte y Titán, que prontamente se organizarán como califatos.
Je, je. No hay que ser tan sarcasticos mister. La victoria de Obama se preparó desde hace 8 años con el antiamericanismo que el partido demócrata adoptó para desbancar a su enemigo republicano. Obama simplemente es la figura que escogieron para encarnar las "esperanzas de cambio" que el momento político demandaba merced al antiamericanismo y a la crisis. Si McCain se hubiera apropiado antes que los democratas del slogan del "cambio", y si los medios hubieran incidido en la discusion de propuestas en lugar de dar lugar al culto de la imagen y caer rendido ante el Obamesías, otra sería la historia.
ReplyDeletePero ni modo. Esperemos nomás que Obama sea fiel a la tradición demócrata de hacer lo que el mundo no se esperaba de ellos. Hegemonía es hegemonía!
Je, je. No hay que ser tan sarcasticos mister. La victoria de Obama se preparó desde hace 8 años con el antiamericanismo que el partido demócrata adoptó para desbancar a su enemigo republicano. Obama simplemente es la figura que escogieron para encarnar las "esperanzas de cambio" que el momento político demandaba merced al antiamericanismo y a la crisis. Si McCain se hubiera apropiado antes que los democratas del slogan del "cambio", y si los medios hubieran incidido en la discusion de propuestas en lugar de dar lugar al culto de la imagen y caer rendido ante el Obamesías, otra sería la historia.
ReplyDeletePero ni modo. Esperemos nomás que Obama sea fiel a la tradición demócrata de hacer lo que el mundo no se esperaba de ellos. Hegemonía es hegemonía!
Je, je. No hay que ser tan sarcasticos mister. La victoria de Obama se preparó desde hace 8 años con el antiamericanismo que el partido demócrata adoptó para desbancar a su enemigo republicano. Obama simplemente es la figura que escogieron para encarnar las "esperanzas de cambio" que el momento político demandaba merced al antiamericanismo y a la crisis. Si McCain se hubiera apropiado antes que los democratas del slogan del "cambio", y si los medios hubieran incidido en la discusion de propuestas en lugar de dar lugar al culto de la imagen y caer rendido ante el Obamesías, otra sería la historia.
ReplyDeletePero ni modo. Esperemos nomás que Obama sea fiel a la tradición demócrata de hacer lo que el mundo no se esperaba de ellos. Hegemonía es hegemonía!
Je, je. No hay que ser tan sarcasticos mister. La victoria de Obama se preparó desde hace 8 años con el antiamericanismo que el partido demócrata adoptó para desbancar a su enemigo republicano. Obama simplemente es la figura que escogieron para encarnar las "esperanzas de cambio" que el momento político demandaba merced al antiamericanismo y a la crisis. Si McCain se hubiera apropiado antes que los democratas del slogan del "cambio", y si los medios hubieran incidido en la discusion de propuestas en lugar de dar lugar al culto de la imagen y caer rendido ante el Obamesías, otra sería la historia.
ReplyDeletePero ni modo. Esperemos nomás que Obama sea fiel a la tradición demócrata de hacer lo que el mundo no se esperaba de ellos. Hegemonía es hegemonía!
eso me hace acordar al hecho de que los medios no muestran los cacerolazos, mientras los de afuera si lo hacen.
ReplyDeleteen fin, la realidad la dibujan los medios y si los medios no lo muestran entonces tenés que creer que no existe aunque lo veas en frente tuyo.