Louis: En el post de 2005, en que propusiste «la adopción como políticas de estado de no más de 4 o 5 cuestiones centrales, que hacen a la esencia de lo que queremos ser como sociedad y como país», dijiste que las sacaste de «Critica de las Ideas Políticas» de Juan José Sebreli. Juan José Sebreli ha publicado un nuevo libro: «Comediantes y mártires». Podrás leer algunos párrafos referidos al Che en esta nota que publicó ayer La Voz del Interior: http://www2.lavoz.com.ar/nota.asp?nota_id=467772. Transcribo uno de los tantos párrafos que describen al Che:
«Después del triunfo de la revolución cubana fue el encargado de los fusilamientos en masa, tras juicios sumarios celebrados sin el menor procedimiento legal por los tribunales revolucionarios instalados en la fortaleza La Cabaña. Los muertos llegaron a ciento sesenta y cuatro; no todos habían sido esbirros de Batista, entre ellos había algunos campesinos.
»Tenía su justificación para ese procedimiento: "Tenemos que crear la pedagogía de los paredones del fusilamiento y no necesitamos pruebas para matar a un hombre" (1959)».
¡Cuántas palabras, «pedagogía de los paredones del fusilamiento», para referirse a «terror»!
Bastaría con que se pusieran de acuerdo en respetar la Constitución (la del 53).
ReplyDeleteSobraría, Nestor.
ReplyDelete¿Quién va a poner la firma en lo de que no haya déficit fiscal? Quizás alguno.
ReplyDelete¿Quién va a cumplirlo? Nadie.
Louis: En el post de 2005, en que propusiste «la adopción como políticas de estado de no más de 4 o 5 cuestiones centrales, que hacen a la esencia de lo que queremos ser como sociedad y como país», dijiste que las sacaste de «Critica de las Ideas Políticas» de Juan José Sebreli. Juan José Sebreli ha publicado un nuevo libro: «Comediantes y mártires». Podrás leer algunos párrafos referidos al Che en esta nota que publicó ayer La Voz del Interior: http://www2.lavoz.com.ar/nota.asp?nota_id=467772. Transcribo uno de los tantos párrafos que describen al Che:
ReplyDelete«Después del triunfo de la revolución cubana fue el encargado de los fusilamientos en masa, tras juicios sumarios celebrados sin el menor procedimiento legal por los tribunales revolucionarios instalados en la fortaleza La Cabaña. Los muertos llegaron a ciento sesenta y cuatro; no todos habían sido esbirros de Batista, entre ellos había algunos campesinos.
»Tenía su justificación para ese procedimiento: "Tenemos que crear la pedagogía de los paredones del fusilamiento y no necesitamos pruebas para matar a un hombre" (1959)».
¡Cuántas palabras, «pedagogía de los paredones del fusilamiento», para referirse a «terror»!
Gracias, Oscar. Un horror.
ReplyDeleteLa vez pasada puse un link sobre el tema de una entrevista en El País.