Tecnología

En estos días tuve la oportunidad de usar un poco la iPod Touch segunda generación de humildes pero dignos 8Gb del hermano menor de La Opinadora. Qué quieren que les diga, impresionante. Estuve navegando por internet, el blog se lee sin problema, viendo videos, escuchando música y demás. Me quedé boquiabierto.

Me entraron unas ganas locas de comprar una. Ese modelo está a unos 230 mangos canadienses (más impuestos) por esta zona. El último aparatejo por el estilo que compré fue mi fiel Sony Clie SJ22, para reemplazar mi Palm V, que en 2003 me costó 250 dólares de EEUU. Todavía tengo la caja original con el precio. Si consideramos que las iPod son los walkman de los 00s, en realidad no son tan caras.

Cuando era chico, durante los Gloriosos 80, tener un walkman era prácticamente imposible. Había que esperar que algún pariente o amigo viaje a EEUU y suplicar a tus padres que pongan la plata. El hermano mayor de un compañero de la secundaria tenía un Sony (el walkman original). Se lo había traído un amigo de Miami. Me acuerdo que íbamos a su casa a mirarlo (no nos dejaba tocarlo, mucho menos usarlo para escuchar música).

Con una iPod Touch podría reemplazar mi Clie, que ya no da para más, para guardar información y encima navegar por internet. Pero me parece que por ahora voy a reemplazarle la batería (5 pesitos en Amazon) y seguir usándola.