Yo nunca terminé de entender muy bien por qué en Argentina, a diferencia de otros países de la región (como Brasil o, sin ir más lejos, Perú) y del mundo, nunca se desarrollaron grandes cadenas privadas de radio y televisión (maravillosamente el único que cuenta con cadenas a nivel nacional, como Radio Nacional o la bazofia de ATC y sus repetidoras, es el gobierno federal). Siempre supuse que se debe a trabas legales.
Ahora leo que el nuevo proyecto de “ley de medios” que impulsa el kirchnerismo, y al que la mayor parte de la oposición se opone por cuestiones de forma y no de fondo, pretende entre otras cosas directamente terminar con la posibilidad de que surjan algún día.
Viniendo de unos de los gobiernos más corporativistas de la historia del país, estas cosas no me sorprenden. Pero lo llamativo es que aparentemente la idea de que la aparición de cadenas de medios va en detrimento de los intereses del país está absolutamente instalada y es compartida por un amplio espectro de la dirigencia política, periodistas y especialistas.
¿Por qué las cadenas de medios estatales contribuyen al desarrollo del país y las de propiedad privada son negativas?
En el peor de los casos, si debemos optar entre monopolios, es preferible toda la vida uno privado.
No se consolidaron cadenas de medios de propiedad privada porque el ESTADO te "nacionalizaban" los medios, como se hizo en 1943 y en 1975... por eso desarrollaron el comportamiento defensivo de quedar bien con el gobierno de turno, y de paso cañazo, compartir negocios. Por eso están desarmados frente a la ola kirchnerista: nunca se le plantaron a ningún gobierno, a menos que ya estuviera de salida, y lo único que hacían era acelerarla.
ReplyDelete