Hace bastante más de doscientos años Turgot escribió lo que sigue:
“el gobierno debe proteger siempre la libertad natural del comprador a comprar y al vendedor para vender” ... “el consumidor que es trampeado aprenderá por experiencia y cesará de comprarle al comerciante tramposo quien perderá su reputación”
“el pretender que el gobierno prevenga los fraudes sería como querer que se entreguen almohadas para todos los niños que pudieran caerse [...] Se pierde de vista que todas las regulaciones son confiadas a hombres que pueden tener más interés en cometer fraudes o en convivir con el fraude ya que el fraude que cometerían estaría cubierto por el sello de la autoridad pública [...] y consecuentmente la nación estará cargada con el peso para salvar a gente indolente que no se toman el trabajo de averiguar ellos al efecto de no ser trampeados”
Siglos y seguimos en lo mismo.
Siglos y el senado prohíbe la venta de aspirinas en los supermercados.
En el fondo no se trata de otra cosa que de volver atrás con todo lo que se avanzó en los 90.
ReplyDelete"En el fondo no se trata de otra cosa que de volver atrás con todo lo que se avanzó en los 90"
ReplyDeleteAhh bue!!! en la próxima vida vas a nacer en la villa 31
Cierto. Porque para la próxima vida todo el país va a ser una gran villa 31.
ReplyDeleteAnónimo, desde 2001 se duplicó la población de la “villa 31” de Retiro, se instalan 11 familias por semana.
ReplyDeleteYa que estamos en el tema, te cuento que otra de las cosas que se duplicó en la ciudad de BA desde la vigencia del “modelo” progresista es la cantidad de ratas.