Una de las cosas que más me impresionó en un viaje a Ecuador en 1991 fue ver a guardias de seguridad con chalecos antibalas y armados con escopetas a repetición en locales de supermercados de Quito y Guayaquil. Para mí no tenía sentido custodiar un local de venta de alimentos como si se tratara de una joyería o un banco.
Leo esta noticia y me pregunto si falta mucho para que se empiece a poner en práctica en los supermercados del GBA:
Dos adolescentes de 15 y 17 años roban un supermercado con una ametralladora Intratec 9mm de las que usan las fuerzas armadas.
No será una joyería pero... vos sabés lo que cuesta los 100 gramos de jamón crudo.
ReplyDeleteRaro que esto pase en un país bendecido po el socialismo nacional y popular.