Te envío un artículo del WSJ acerca del IVA.
Nunca faltarán economistas "ortodoxos" que lo propongan, o propicien aumentar su alícuota). Puedo demostrar que en Argentina -no conozco los detalles de otros países- ha causado, ente otras cosas, un persecución implacable del fisco contra los contribuyentes, una serie de reglamentaciones ilegales e inconstitucionales, la negativa infundada a computar créditos fiscales reales, y en el caso de los exportadores, abultados saldos teóricamente "de libre disponibilidad" favorables al contribuyente que el fisco se niega a reconocer su transferencia o demora su acreditación o pago. Es en algunos aspectos peor que el impuesto a las ganancias, y además cuando la administración federal de ingresos públicos actúa arbitrariamente, sus efectos deletéros se suman, porque si se niega a computar como créditos fiscales las compras por las que se pagó IVA, correlativamente tampoco se computarán en el impuesto a las ganancias como costos deducibles.
Además, como lo muestro en un artículo reciente que publicaste ("La repetición de impuestos....") los impuestos indirectos, aun aplicados sin las arbitrariedades argentinas, no son íntegramente trasladables al consumidor, en la parte no trasladada, operan como un nuevo impuesto sobre los ingresos de los contribuyentes (empresas y responsables inscriptos en general), y en cuanto se trasladan, inciden en el bolsillo de los consumidores.
Julio
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