Bueno, si es cierto que Boudou confesó en el Senado que hay 1,5 activos por cada pasivo, y que aproximadamente la mitad de los jubilados provienen de la moratoria del 2003, el colapso del sistema previsional es inevitable.
Posiblemente puedan aguantar a los manotazos un año más o algo así, pero entonces nada ni nadie podrá evitarlo.
Desde ya, la solución no pasa ni remotamente por aumentar las jubilaciones como plantea la oposición, ni en malversar los fondos de garantía como hace el gobierno.
Obviamente, cualquier postura más o menos seria propondría -en lugar del habitual cruce inservible de chicanas- decretar de inmediato una emergencia previsional, y hacer urgentemente una profunda reforma del sistema, que incluya una adecuación a la actual expectativa de vida y a las demás variables.
Claro, el gobierno quiere estirar la cosa para que le explote a otro, y la oposición quiere que explote ahora.
Me parece que ninguno de los dos quiere solucionarlo.
Raquel Reznik
Yo creo que la mayoría de argentinos ni siquiera tiene conciencia de lo que les espera.
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