Ejercicio de construcción del relato (II)

Al final Cristina va a tener más biografías que carteras Louis Vuitton, con un panoramita que va de mina desquiciada, a que mea agua bendita, pasando por mujer golpeada/dominada, etc. Es así che, la esposa del Néstor contará con más versiones que el Microsoft Office.

Porque bué, resulta que, a la biografía meliflua de Olga Wornat, a la vitriólica de Silvina Walger, se suma ahora un pedido  de "un alto funcionario del gobierno" para que Sandra Russo (sí señora, la panelista de 678) (no, en serio, señora, no es joda) (señora, ¡pero le juro que no le miento!) le haga ooootra biografía más. Espero que Cristina tenga calzones en cantidad, porque esta mina se los va a querer comer todos.

Digo, qué fijación que tiene esta gente con el puto relato. Viven pendientes del relato, gastan tiempo, esfuerzo, recursos, ingenio en el vano relato. La mandan desde el gobierno a una periodista adicta al régimen a hacerle otra bio. Lo que se dice es más importante que lo que es. Dieron vuelta la frase del ecuestre General "la única verdad es la realidad" (no señora, ya sé que la frase no es originalmente de Perón, no me joda más, déjeme correrlos por el lado peroncho un ratito) y la cambiaron por la de la equina Capitana "la única realidad es la verdad", siendo "la verdad" lo que ellos (nos) digan que es.

Whatever...