En el noticiero de esta mañana comentaban que las encuestas hechas en la ciudad de Québec muestran que la mayoría de la gente está de acuerdo con que se utilicen fondos públicos federales y provinciales para la construcción de un nuevo estadio de hockey para que la ciudad vuelva a tener un equipo profesional de ese deporte.
No sé si es mala fe o son ignorantes en serio. La pregunta no es si estamos de acuerdo en gastar la plata de los demás en proyectos inviables económicamente sino si estamos dispuestos a gastar la propia.
Para gastar plata ajena somos todos como chanchos.
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