Basados en la falacia que el libre mercado no soluciona los problemas de la gente, se lanzan empresas estatales para intentar solucionar dichos problemas. Finalmente, solo terminan resolviendo los problemas financieros de la militancia rentada que consigue un cargo en la empresa estatal.
Yo creo que la crítica no hay que centrarla tanto en los resultados, generalmente estrepitosos fracaso, ya estudiados y bien descriptos en la literatura, es decir no son desgracias imprevisibles, es algo perfectamente explicable. Si solo fuera un tema de resultados, cabría la chance que mejorando la gestión o cambiando a los responsables de la gestión, las perdidas se transformen en ganancias. O también se puede concluir que no es un tema crematístico, que la empresa estatal no tiene que generar ganancias sino que solo tiene que prestar un servicio. Pero justamente, ese servicio que presta la empresa estatal ¿qué costo tiene? ¿Puede la empresa privada brindar el mismo servicio a menor costo?
Entonces la crítica a las empresas estatales hay que centrarlas en si verdaderamente existía un libre mercado previo a la intervención del Estado. Que Aerolíneas Argentinas, Entel o los Ferrocarriles pierdan plata no debe ser el centro de la crítica. Ni cuando existía la Aerolíneas estatal ni luego de privatizarla hubo libre mercado aeronáutico (o cielos abiertos), por lo que es un supuesto que se necesita la intervención del Estado para brindar el servicio en zonas "no rentables". De hecho, como la mayoría de las empresas, el servicio de transporte aéreo en Argentina tuvo un origen privado (como los ferrocarriles o el mismo Banco Provincia) y Aerolíneas surgió de expropiar a sus dueños las pequeñas empresas y fusionarlas (Perón lo hizo).
Ya sé que al final volvemos siempre al mismo tema, lo de las empresas estatales no es un tema racional sino que es solo pasión. Es parte del fascismo nacionalista arraigado.
Exacto, Rothbard, lo de la existencia de empresas estatales nunca fue un tema racional. Y no lo es en casi ningún lado. Sencillamente porque no resiste el menor análisis serio. Las empresas públicas existen para satisfacer cuestiones que no tienen nada que ver con la eficiencia en la asignación de recursos.
ReplyDeleteComparto el post. Hay quienes plantean la posibilidad de que existan empresas estatales eficientes tratando de justificarla racionalmente. Mi respuesta es mostrarle el esquema de incentivos y controles que impulsa a un empresa privada a ser efciente en un mercado libre, y confrontarlo con los de una empresa estatal. Alguno que otro entiende la diferencia, la mayoría rebobina y empieza a recitar desde cero sus argumentos de siempre.
ReplyDeletePablo