Es lo que me temo

Dos respuestas a mi pregunta, de Nico:

Te contesto lo que quiere la popu. Quiere gente que mágicamente le solucione los problemas. Quiere mesiánicos que bajen del cielo y solucionen todo con dos o tres medidas salvadoras. Quiere -la gente- no preocuparse por nada más que por el partido del domingo, por el asado y por poder comprar en cuotas. Quiere que sus hijos vayan a la escuela para que no molesten en casa. Quiere, cuando advierte -la gente, nuevamente- que los chicos no sólo no aprenden sino que involucionan, moler a palos a los docentes. Eso quiere. Sangre. De los milicos, de la cana. De los opositores, de sus vecinos o de los "empresarios que lucran con el hambre del pueblo". Que pierda Ríver quiere la gente. O Boca. O todo lo contrario. Quiere disfrutar la desgracia ajena. Y si es la desgracia de "los ricos", mejor. Mucho mejor.

Una anécdota para ilustrar el pensamiento de la popu. Y me consta. Un empresario pasó con su Mercedes Benz por entre varios manifestantes. Para qué. Lo reputearon hasta en arameo. ¡Garca! ¡Ladrón! ¡Explotador de los trabajadores!, etc., etc., etc. Hasta le apedrearon el auto, nada bien la pasó. Tiempo después, ese mismo empresario pasó nuevamente cerca de una manifestación, esta vez con su Ferrari...¡Maestro! ¡Fenómeno! ¡¿No me llevás a dar una vuelta?!, etc., etc., etc. Así es la perrada. Mercho = Garca, Ferrari = Langa. No tengo ninguna esperanza.

De un comentarista anónimo:

Es así, como dice Nico, putean al gobierno en todos los idiomas pero si seguís hablando usan la frase "son unos ...PERO..." y ahí ya sé que se van al carajo porque automáticamente empiezan a hablar de las "buenas intenciones del gobierno". ¿Los resultados? eso es para gente sin corazón, neoliberales, y si se insiste vienen solos (los resultados). El minguito que tienen en la cabeza es chiquito y duro es difícil que algo les quede.

Agrego yo. Ojalá todo esto se limitara a los sectores de menores ingresos y menor acceso a la educación. Lo que más me preocupa a futuro es el entusiasmo que generan estas ideas y propuestas absolutamente insostenibles en amplios sectores de la clase media acomodada urbana del país.

Ustedes me podrán decir que es una moda, que la gente se prende en cualquier cosa. Y en una de esas tienen razón. Pero honestamente no sé quién va a invertir un peso en un país en el que este nivel de locura colectiva está siempre a la vuelta de la esquina. Muy complicado realmente.