Sobre Argentina, al que considera “demostradamente desde todo punto de vista el más exitoso de los países hispanoamericanos”, escrito en 1975:
Hoy está de moda renegar del proyecto que para Argentina concibieron Sarmiento, Rivadavia, Alberdi y Mitre. Pero quienes execran a estos hombres y los califican de traidores, son ellos mismos producto de aquel proyecto, descendientes biológicos y culturales de los inmigrantes que de otra manera no hubieran venido a Argentina. Y no existe más en Argentina el cuadro descrito por Sarmiento. El primer ferrocarril argentino fue inaugurado en 1857, con diez kilómetros de vía. Para 1890, Argentina tenía nueve mil kilómetros de vía férrea; diecisiete mil kilómetros en 1900; y treinta y tres mil en 1912. A fines del siglo XIX, aquella pampa cuya vida social había sido cincuenta años antes comparable o peor a la de las nómadas del Asia central, había sido en efecto civilizada y convertida en una de las regiones agropecuarias más productivas del mundo, por la combinación de capital y tecnología ingleses y de inmigrantes italianos. Entre 1869 y 1914, la tierra cultivada aumentó de 0,05 hectáreas por habitante a casi tres hectáreas por habitante (y esto a la vez que la población se duplicaba, gracias a la inmigración). En comparación, para 1914 Francia cultivaba 0,6 de hectárea por habitante, y los EE.UU. menos de dos. En 1875 Argentina todavía importaba cereales. Apenas doce años más tarde, en 1887, exportó 237.000 toneladas, y es hasta hoy un exportador neto de alimentos, a la vez que el consumo argentino de carne fue de más de 70 kilos por habitante en 1974!
Y sin embargo, jóvenes argentinos llamados Smith, O'Brien, MacLaren, Brandt, Cuccioli, Koustakis, Roselfed, Jansen o Marinelli juzgan intolerable la situación de su país “arruinado por el imperialismo”; y como peronistas de derecha o de izquierda, “montoneros” o miembros del “Ejército Revolucionario del Pueblo” (también marxistas), se declaran a sí mismos herederos y vengadores de los indios precolombinos, y héroe precursor al tirano Rosas.
Quisiera que alguien me explique por qué.
¿El problema será ignorancia o contaminación de las neuronas con materia fecal y gases intestinales?
ReplyDeleteIgnorancia no es, porque lo saben, conocen los hechos. Es falta de lógica en su razonamiento o incoherencia entre el razonamiento y los actos que realizan. Si estan en contra de los Alberdi, Sarmiento Roca Mitre etc. Regalen sus posesiones a los aborigenes y vuelvanse a Europa como vinieron sus ancestros.
ReplyDeleteSupongo que es un problema de coherencia, cuando le hice ese razonamiento siempre terminan putendome, lo que tiene lógica.
Excelente, pido permiso para postearlo in my blog, I love my country, Argentina.
ReplyDeleteSiempre citando la fuente, of course
Besos
Pero por favor, faltaba más.
ReplyDeleteAlgunos lo toman como la muestra máxima de humildad. No es joda.
ReplyDeleteMe resulta difícil expresarlo en pocas palabras, para mi:
ReplyDeleteLa Argentina, pese a Sarmiento, Alberdi, Mitre y Urquiza y gracias a su oligarquía vacuna y agrícola sufrió la influencia cultural europea continental. Miró y fue el reflejo de la Europa continental y no de Inglaterra o Usa. Nada de 'rule of law' y mucho de bonapartismo, educación patriótica nacionalista, herencia de la Revolución Francesa y el idealismo alemán (Kant, Hegel, Marx)más que del iluminismo inglés(Locke, Hume). El impune golpe del '30, en mi opinión, proviene de una preparación previa que facilitó el camino para el fascismo nacionalista, con la importante alianza -esto será duro para algunos- de la iglesia católica. La cultura argentina es feudal. Para mí es como que la batalla cultural la ganó Rosas. El fenómeno nacionalista europeo le hizo mucho daño a la libertad individual y se acomodó bien a los que lucraron con la barbarie previa, vean si no esta descripción de Alberdi.
perogruyo: yo tambien pienso que la batalla cultural la ganó Rosas :(
ReplyDeleteEl nacionalismo católico es lo que cundió.