Pero me parece que la de octubre es la última oportunidad para sacar a esta gente del poder con el voto mientras todavía le lleven el apunte a los resultados electorales.
De ahí en más, como en Venezuela, habrá que esperar que se caigan solos.
Si bien ahora a nadie se le mueve un pelo por estas cosas, no deja de ser muy grave.
siempre esta la alternativa de un cancer "pelvico".
ReplyDeleteYo cada vez pienso que el final puede ser mucho peor que diciembre de 2001 y va a ser la única forma de sacarlos. Cortar el clientelismo y los subsidios a gente que hace casi 10 años que no trabaja en serio y vive de lo que le van tirando en planes, va a ser muy duro. Esa gente cree que tiene el derecho a que los demás los mantengan. Más los miles de empleados estatales que hacen bulto en las oficinas que van a diluir el salario de los que sí trabajan. Yo me imagino un final violento tipo ataque de los zombies, con protestas y saqueos, y la gente común a los tiros para frenarlos. El final se puede precipitar por una huida masiva de la moneda debido a la inflación, o por algo externo (una caída del precio de la soja, as importaciones de Brasil y China).
ReplyDeleteAyer tuve una epifania, a los habitantes de la Argentina les gusta esto y siempre lo van a elegir aiempre. Mejor vivir pobre con plancito que arriesgarse a laburar y que lo hechen para tener un poco más.
ReplyDeleteLas ganas de progresar, de salir del conventillo, de tener m´hijo el dotor se murío con nuestros abuelos y los nuevos immigrantes traen la cultura inmanentista de la religion de la Pachamama. Las cosas ocurren solas o no ocurren, no depende de nosotros, como esta esta bien no hay mejor no hay peor. Las elites argentinas siempre pensaron que podrian controlar estas masas pactando de alguna manera con ellas, por eso toleraron al peronismo y al sindicalismo. Intentaron cuidarse de la revolución total marxista que tuviera como objeto eliminarlos a ellos. Pero ahora el numero de los que viven de las tetas del estado crece demasiado. Frank Rearden es una ilusión de Hanna Arend que no exist en ningun ligar del mundo, pero aqui nuestros industriales fueron del otro lado y se prendieron todos de la teta del estado, sin ver que el estado se los iba a devorar tambien. Ahora es demasiado tarde. Ellos estan en el poder y lo conservan violando la propiedad privada para crear dependientes. Cada vez van a requerir mas y habra menos que la produzcan y la dejen al alcance del gobierno, hasta que todo sea de todos. El destino de america latina (no se si alguna parte del mundo se salvará) es el pobrerío populista por voluntad popular.
Gracias Rothbard. Leerte siempre me levanta el ánimo.
ReplyDeleteLástima que creo que tenés razón.
De nada Cartancho. Como decían la otra vez en Twitter, existen dos tipos de judíos, los optimistas y los pesimistas. Los optimistas están enterrados en Auswitch, los pesimistas viven en Manhattan en la 5ta avenida frente al Central Park.
ReplyDeleteBuena observación, Rothbard. Siempre pienso en aquellos que creian que aun habia esperanza mientras los llevaban al matadero. Superiores en número, por más que no tuvieran armas sólo habrían de caer los primeros... sin embargo estaban moralmente derrotados.
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