"En ésas, algún propietario desesperado, impaciente, y si rascamos un poco seguro que fascista, racista, machista, violento, homófobo y misógino -etiquetas que en España suelen atribuirse en bloque a cualquiera que no se baje los calzones y ofrezca el ojete sin rechistar- debió decidir que aquella situación la solucionaba él a título personal, por el artículo catorce. Así que cuatro individuos fornidos tiraron la puerta, cogieron a los okupas en brazos y los sacaron a la calle. Acto reprobable, éste, que acogiéndome a la retórica al uso me apresuro a calificar -conste en acta para que no haya dudas sobre mi punto de vista ético- de terrorismo urbano. Incluso de genocidio perroflauta. De mi opinión debieron ser también los desalojados; pues en seguida pidieron apoyo a través de las redes sociales, y al poco se congregaron tres docenas de presuntos representantes del 15-M exigiendo reparación aún más indignados si cabe; pues la policía, que acabó presentándose, no actuó contra los malvados desalojadores ni devolvió las cosas al statu quo ante. Como si no estuviera clarísimo y consagrado por el uso hispano que, entre patada a la puerta de un okupa y patada a la puerta de un propietario, el segundo es quien actúa al margen de la ley, y el primero es la verdadera víctima del asunto. Por favor. A estas alturas."
echa
ReplyDeleteGracias anónimo!
ReplyDeleteLeer tantos textos de aspirantes al doctorado me hace escribir con errores ortográficos.
De nada, maestro!
ReplyDeleteEs lo que hay que hacer.
ReplyDeleteSi esperàs a la "justicia" morìs esperando.
Pero como, ese propietario abusador aún esá libre? deberían condenarlo a trabajo forzado para retribuir a la sociedad, sobre todo a los indignados... aaa, pero claro, si es propietario ya habrá trabajado forzosamente, y seguramente a constribuido a la sociedad de esos "indignados".
ReplyDeletePueden tener razón en muchas quejas los indignados, más no en las causas, buenas intencions, pero con ello no se hace nada, sino daño, si es guiado por el desconocimiento y la sinrazón, el pensamiento mágico que dicen. Están siguiendo cantos de sirena.
Gracias Donfreeman.
En mi pueblo estaba la leyenda (muy probablemente cierta) de un tipo dueño de departamentitos que, cuando los inquilinos no le pagaban el alquiler (y parecían seguir con esa actitud okupa), les mandaba a "los pintores".
ReplyDeleteÉstos eran unos fornidos muchachos que caían con unos baldes de pintura y al grito de "Nos mandó el dueño a pintar", pintaban el interior de la casa....a baldazos.
La "justicia" está siempre en contra de la propiedad privada.