Desde que salió la SUBE me pregunté para qué joraca te "inscribían" en el sistema con nombre y apellido, con un formulario y todo. En San Isidro, al contrario y como ejemplo, para estacionar en los parquímetros, uno compra unas tarjetitas inteligentes en los kioscos, totalmente útiles y totalmente anónimas, y estacionás en cualquier lado. ¿Por qué en SUBE te registran?
Obviamente, hoy leo que con la tarjeta SUBE, el estado registra el quién, dónde y cuándo de cada viaje.
Díganme ingenuo, pero prefiero 1000 veces que, si alguien tiene que tener mis datos, los tenga una empresa privada antes que un gobierno. Una empresa privada los podrá usar para ofrecerte cosas. El gobierno, de una manera u otra, de más legal a menos, indefectiblemente para sacarte.
JL, me extraña, tu falta de fe en la capacidad del estado/gobierno de controlarse a sí mismo es preocupante.
ReplyDeleteEs una locura fascista.
ReplyDeleteSì, yo dije lo mismo. No faltò el inocente (boludu?) que me dijo: "para que no te la use otro si la perdès".
ReplyDeleteNo se dan cuenta hacia dònde vamos? què barbaridad es esa de pedirte tus datos para pagar los boletos de subte?
No, definitivamente, estamonelorno.
Y la gilada sigue en Babia.
Emma Peel
Entiendo por las mías (sin asesoría externa) que la dichosa tarjeta será usada para el control de las ganacias de las empresas de transporte, que de otro modo sería imposible. Durante mucho tiempo las empresas "perrearon" sus ingresos debido a que manejaban sólo efectivo y los comprobantes emitidos no podían ser controlados pero con la reposición de la tarjetita (entre paréntesis durante más de dos meses no se pudieron conseguir porque no había material para hacerlas) se podrá conocer cuanto recauda cada uno de los transportistas. Ahora bien, ¿de qué le puede servir al estado fascista conocer cuántas veces viajé hasta tal lado o cuántas lo hice hasta tal otro lado? ¿Qué dependencia y qué compus tendrán que habilitar y cuántos empleados tendrán que contratar para llevar adelante una estadística al divino pe que no servirá para nada? ¿Le darán la tarea al INDEK?
ReplyDeleteEs una de esas medidas tipo Tren Bala que nunca se llevan adelante por ser no sólo inútiles sino tambié descabelladas. La siguiente será, me lo supongo, censar las palomas de la Plaza de los Dos Congresos o contar los durmientes de las vías del Roca.
El tema se toco por aca hace unos meses.
ReplyDeleteEl tema de los datos no solo es para un seguimiento, es para cobrarte diferenciado segun tus ingresos.
Como los datos lo cruzan con la Afip, si sos beneficiario de un plan trabajar, viajas gratis.
Si tenes un sueldo del estado o de algun gremio amigo del gobierno, pagas el minimo.
Si sos empleado de una multinacional (cajero en McDonalds) pagas 3 $.
Y si tenes casa auto y un sueldo que te permite llegar a fin de mes, vas a pagar 5 mangos el viaje.
Parece joda, pero no lo es.
Primero me controlaron los viajes en colectivo, pero no me importó porque era una pavada.
ReplyDeleteDespués me controlaron... pero no me importó...
Ahora me controlan... pero ya es tarde.
Vamos camino a Cuba vía 1984.
Es el uso de la alta tecnología por un gobierno totalitario.
Lo importante es pagar poco y disfrutar de la vida. ¿Viste, gordo?
Libertad, intimidad, privacidad...
esos son lujos burgueses. Cosas que no importan y por las que se preocupan los cajetillas.
SUBE= Primer paso a la tarjeta de racionamiento cubana.
Ahora somos todos iguales. Salvo los que tienen mucha plata, porque hacen negocios con el régimen. Esos pueden "comprar" su derecho a la privacidad. El resto: agache la cabeza! Que el Estado le rompe las piernas y le regala las muletas para que pueda caminar.
Y la perrada contenta. ¡Esto es justicia social! Somo todo pobre.
Te van a discutir que esto es para bien.
Prácticamente nadie está viendo el peligro que implica esta serie de controles por parte de un Estado que no respeta los derechos individuales.
A mí que no me subsidien nada: que me dejen de sacar lo que me sacan.
De todo esto no volvemos, ni después de un colapso. No se hagan ilusiones.
El Estado y sus subsidios, incluso cuando aún seguían estando vigentes, no llegaron a muchas de las empresas de colectivos y jamás se les dio explicación a los trabajadores.
ReplyDelete¿Dónde fue la platita entonces? Bueno, seguro quedó en el Estado. ¿Pero en qué se invirtió? En cosas muy productivas, seguro........
Para ser sincero, mis viajes son con monedas y tarjetitas de subte... La SUBE quedó arrumbada en la billetera.
Total, mis datos los tienen desde antes de la invención de la boludez magnética. Y calculo que los de todos y todas también.
Hachedoscero, dijo la Reina Batata en una destada demostración de su única neurona viva.
ReplyDeleteNo les extrañe que dentro de poco (ya que nos tienen a TODOS y a TODAS) controlad@s por INGSOC, que se venga la ¨afiliación obligatoria¨ al FpV, como hace no mucho tiempo atrás, lo fue para el Peronismo, donde tod@s éramos ¨compañeros¨ shequetengueshequetengue.
Agradezcámosle al fascismo del Gral. Juan Domingo Cangallo por habernos dejado arrastrar hasta este momento histórico.
meg@radio.
¿Por que no usan la tarjeta Monedero (la verde) si te la dan sin pedirte ningun dato?.
ReplyDeleteCorríjome: quise decir ajo y hachedoscero.
ReplyDeletemeg@radio
No sé si habrá otro estado en este mundo qe controle los viajes de los ciudadanos, o que los segmente según un supuesto nivel socio económico.
ReplyDelete¿qué quiere decir esto? ¿que los servicios públicos ya no son más públicos?
Otra duda: ¿Los jóvenes estudiantes no van a manifestarse para que les aseguren un boleto estudiantil?
Yo creo que igual, los únicos que van a pagar el boleto subsidiado van a ser los de los planes (cuando no), los jubilados y creo que nadie más.
Es asfixiante el nivel de intervencionismo (más bien ya intromisionismo) del estado (más bien, del gobierno) en la libertad de las personas. Pero ahí están las laras colas de gente que va y se entrega en bandeja para pagar un mango menos...
La república ha muerto asesinada hace rato. Y a nadie parece importarle.
@ciudadano del ocote del mundo
ReplyDeleteYa lo decía Ayn Rand hace décadas. Y se está cumpliendo.