Estos personajes son la mejor campaña para convencer a la gente en Argentina de la necesidad de prohibir terminantemente por ley al estado/gobierno en sus tres niveles la propiedad, participación, financiamiento y/o subsidio de medios de comunicación de todo tipo.
Lo que va a costar salir de todo esto.
Este flaco hizo la Gran Lopez Rega, de cabo a inspector general de un plumazo.
ReplyDeleteQue pais generoso........
Una periodista, ex compañera del sujeto en cuestión en Duro de Domar, dijo ayer, en Twitter, que, después de conocer la noticia, lo llamó y éste le dijo que no hablaba con periodistas.
ReplyDeleteEsta en uno de los blogs de La Nación.
Claro que va a costar, pero en sufrimiento para la gente, no en tiempo. Cuando el común de la población -llamo el común a esa mayoría de argentinos que piensa con el ombligo y que no ve más allá de lo que la nariz le permite- empiece a notar la diferencia entre lo que imagina posible y la realidad y le duela el bolsillo, este castillo de naipes se viene abajo más rápido de lo que se puede imaginar.
ReplyDeleteHay quienes piensan que la cosa sucede en Marzo. Es un poco demasiado optimista. Pero creo que no pasa de julio-agosto que se empiecen a caer los ladrillos, de a uno al principio, en ristra más adelante.
Ocurre que ese desmoronamiento no ha de ser gratuito, ni para los paniaguados ni para los que no disfrutaron de la festichola: Cada cascotazo significará "Blood, sweat and tears" (para estar a tono con quién en sus discursos, cada vez mete más "anglicismos") y creará anticuerpos momentáneos para que por un rato un experimento igual no se repita.
Eso es lo que sucede cuando se trata de construir castillos impresionantes sin cimientos o con cimientos endebles y aquí no se le ha dado bolilla al terreno en que se apoyaba, porque el asunto era hacer el negocio rápido y liquidar ganancias al retirarse.
Miguel, concuerdo con tu mirada sobre el efecto cascada o dominó con que la realidad aplastará esos pobres sueños en 30 cuotas y a colores.
ReplyDeleteDesgraciadamente son muchas decadas de colonizar mentalmente a la población. Y como resultado, los responsables nunca serán los culpables.
Quizas sea una cuestión que trasciende lo meramente político y económico para internarse en la psiquis.
Aceptar que los responables sean los culpables hace partícipe en las consecuencias a todo aquel que sostuvo con su voz o con su voto esta aventura. Es más, aquel a quien le hacía "ruido" su decisión de apoyar esta fiesta quiza sea quien más fevientemente busque al CULPABLE. Culpa que externamente se expiará en el consabido "YO NO LA VOTE", pero que para completar la purificación necesitará del OTRO donde colocar toda su frustración.
Y ese OTRO, el victimario de su sueño, no será quien lo acunó, será quien lo despertó.
Creo que en un comentario aqui, no recuerdo, es que leí que la Argentina pasó de la religión católica, de la culpa eterna, a la religión progresista de la culpa ajena.
Saludos, Martín.