Ahora, ¿no creen ustedes que las sociedades que eligen y reeligen a personajes nefastos como Chávez, Morales, Correa, Ortega y Kirchner (Néstor del Pueblo y su viuda) por lo menos en parte se los merecen?
Me asombra que la gente necesite pasar por una desgracia personal debida a la hijaputez de esa gente, y no le alcance con el sufrimiento que le causan a los demás. Como pensando que nunca les iba a tocar a ellos. Para ellos solo los subsidios y los planes, nunca un palazo.
Una gran y extensa sociedad adolescente como la que habita al sur del Río Bravo jamás aceptará un gobierno diferente a aquel que le permita desplegar sus fantasías justamente adolescentes: "Somos los mejores. Somos el centro del universo. Los demás nos envidian. Quieren perjudicarnos. El mundo empezó con nosotros, etc..."
Y también como un adolescente, la sociedad está llena de temores, dudas e inseguridades, lo que produce el combo del veleta hormonal perfecto.
Como ya escribí. De la pesadilla adolescente las sociedades cada tanto despiertan. Pero no lo ven como una pesadilla, y por lo tanto, Siempre el culpable será el que ME DESPERTO de ese sueño, Nunca el que me Acunó.
Sí, lástima que caen todos en la volteada.
ReplyDeleteMe asombra que la gente necesite pasar por una desgracia personal debida a la hijaputez de esa gente, y no le alcance con el sufrimiento que le causan a los demás. Como pensando que nunca les iba a tocar a ellos. Para ellos solo los subsidios y los planes, nunca un palazo.
ReplyDeleteUna gran y extensa sociedad adolescente como la que habita al sur del Río Bravo jamás aceptará un gobierno diferente a aquel que le permita desplegar sus fantasías justamente adolescentes:
ReplyDelete"Somos los mejores. Somos el centro del universo. Los demás nos envidian. Quieren perjudicarnos. El mundo empezó con nosotros, etc..."
Y también como un adolescente, la sociedad está llena de temores, dudas e inseguridades, lo que produce el combo del veleta hormonal perfecto.
Como ya escribí. De la pesadilla adolescente las sociedades cada tanto despiertan.
Pero no lo ven como una pesadilla, y por lo tanto,
Siempre el culpable será el que ME DESPERTO de ese sueño, Nunca el que me Acunó.
Saludos, Martín.
Es así, Martín.
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