Apr 11, 2012
Peores que los perros
Reposteo cambiando bastante las palabras de una idea que puse en un comment a un post de Louis, y me gustó cómo había quedado.
Los argentos tenemos una tara mental que de alguna manera nos impide unir efectos con sus causas.
Cuando todo se vaya finalmente al joraca, vamos a volver a presenciar (otra vez más en nuestra historia) cómo salen los zurdos de todos lados a explicar que fue por la corrupción, por la impericia, por el capitalismo de amigos, por la justicia corrupta, por los especuladores (ya oímos por los noticieros que no hay yerba ¡¡¡POR CULPA LOS ESPECULADORES!!!) por lo que sea, y en última instancia por el culpable comodín: el neoliberalismo. Por cualquier cosa, menos por la receta populista.
Mezclamos arena con meo y un poco de bosta de caballo, revolvemos, metemos el menjunje al horno y queremos que salga un fragante bizcochuelo de vainilla. Y cuando vemos que del horno lo que sale es una mezcla hedionda y humeante... pues le echamos la culpa al cocinero, o a su ayudante, o a la cocina, o al gas del barrio donde está la casa donde estamos cocinando. Pero la receta, lo que se dice la receta, ni se nos ocurre cuestionar.
Para unir causas con efectos, los perros de Pavlov -inconcientemente y todo- tenían más habilidades que el argento promedio.
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No se si aporto algo con mi experiencia, porque realmente no sabría decir que fue lo que me hizo empezar a dudar o cambiar mi forma de pensar.
ReplyDeletePonganle que yo a los 15 años aprox. viví lo del 2001, cuando tenía menos idea política que nada. En ese momento vaya saber uno porque medios, ya que mis viejos nunca me inculcaron ninguna creencia política (ni peronistas, ni radicales, ni nada en especial son), creía que la izquierda era "buena", la derecha "mala", el centro "ni fu-ni fa". Que el Neoliberalismo era el causante de todo, que la industria nacional debía ser defendida, que las importaciones eran malas (capitalismo malo malo) etc, etc... Creo yo, el pensamiento de muchos de mi edad (y de ahora también).
Como no cambié ideológicamente de un día para el otro, hasta el año 2005-2006 pensaba que el gobierno hacía las cosas bien (o no tan mal), que estaba todo tránquilo, que los de las AFJP estuvo bien, y así con muchas propuestas.
Recién en esos tiempos y muy de a poco realmente, empece a ver un poco del liberalismo, capitalismo, lo que propone la izquierda, la derecha (estas dos estan a la vuelta de la esquina cada una entre sí) y me di cuenta lo que ustedes mencionan constantemente... la receta siempre es la misma, lo demás es una realidad ficticia... si nos va mal es por los malos de los políticos.
No puedo decir ahora que tengo una postura política definida más que decir que estoy a favor de manejar lo más posible mi vida (responsabilidades) y ser libre como consecuencia de eso sin molestar al prójimo.
Volviendo al hilo principal de lo que quiero decir, es que siendo hijo de clase media sin ventajas ni desventajas claras, fuí capaz de darme cuenta de estas cosas y hoy en día en muchos amigos me veo a mi mismo hace unos años defendiendo lo indefendible. ¿Qué fue lo que escuche o lo que viví para cambiar? No lo se, ojalá pudiera darme cuenta para saber como empezó y poder transmitirle esto (sin forzar a nadie) a otras personas para que tomen sus conclusiones. No se, ¿a alguien le sucedió algo parecido?
Muy bueno, JL.
ReplyDeleteBueno es el comentario de Gabbe, Louis. Ya lo estoy posteando.
DeleteJL
El ejemplo un poquito repugnante, pero muy gràfico.
ReplyDeleteEs la repugnancia que me dan los ingredientes actuales, carancho.
DeleteSepa disculpar.
JL
clap, clap , clap.
ReplyDeleteBreve sintesis de los ultimos 80 años de la Argentina.
Juraría que había un comentario anónimo...
ReplyDeleteY al final el mío quedó colgando del pincel.
Eso me pasa por meterete.