En las sociedades en las que se privilegia la redistribución en lugar de la creación de riqueza

Todo se limita a quién se queda con la porción más grande de una pizza que con cada año que pasa se acurruca más y más en el centro de la caja.

Contrariamente a lo que creen millones de argentinos, Argentina es un país pobre no porque alguien se queda con sus riquezas sino porque los argentinos no generan la riqueza suficiente para tener el nivel de consumo que están convencidos que se merecen.

La riqueza no es lo que está, no es el stock, sino lo que no está, el flujo, lo que se genera.