Este artículo ayuda al dilucidar un poco la pregunta que nos hacemos por acá, acerca de si "los pueblos tienen los Gobiernos que se merecen" o no:
Hace muchos años alguien dijo que don Juan Carlos I era "un rey que no nos merecíamos". Desde luego, lo dijo como elogio al monarca. Eduardo Haro Tecglen, que no es de mi devoción, le respondió, con razón, que nadie se merece un rey, ni éste ni ningún otro: nadie se merece lo que no elige.A esto se suma la muy manida frase, muy repetida últimamente, en la que se afirma que los pueblos tienen "los Gobiernos que se merecen". Hombre, si se considera que, en el caso español, todos los Gobiernos son elegidos, la cosa parece cierta. Sólo lo parece, porque hemos elegido siempre alguna parte de lo que había.(...) Nos merecemos el Gobierno que tenemos –y no me refiero sólo al actual, también al precedente– en la medida en que lo hemos elegido. Pero también en la medida en que no podíamos elegir otro.(...) Por otra parte, aun este Gobierno, con mayoría absoluta, no es la elección de todos. Apenas de una parte, mayoritaria, sí, pero con una mayoría que sólo las matemáticas del señor D'Hont pueden hacer absoluta. Y todos habrán de vivir con él durante al menos una legislatura, les guste o no, como yo tuve que vivir casi ocho años con Zapatero, sus ministros y sus ministras, esa gente increíble que produce el PSOE, (...).
(...) Quizá nadie se merezca a su pareja, la posibilidad de elección es limitada y el enamoramiento lleva a cometer errores. Pero en ese caso la elección, y la correspondiente renuncia –elegir es siempre renunciar a algo, decía Sartre–, es individual, afecta muy relativamente a la vida de otros; en todo caso, en el entorno inmediato.(...) La elección política es una manifestación de masas. Cada vez que hay elecciones, me pregunto por qué el voto de mi vecino, que no se interesa en absoluto por la política, vale tanto como el mío, que me paso la vida estudiándola. No lo odio por haber colaborado activamente a mantener a Zapatero en Moncloa, pero me planteo dudas sobre su idoneidad, sobre su capacidad, como reclamaba la Constitución de 1812, de ser "justo y benéfico". Una indicación de lo que deberían ser los ciudadanos, no de lo que son.(...) Los pueblos no tienen los Gobiernos que se merecen, nunca, porque en democracia se suele excluir a una parte importante de la sociedad.
Los reslatados son míos.
A mi me gusta mas la frase:
ReplyDelete"Los pueblos tienen los gobiernos que se le parecen."
Yo prefiero la de Borges: "la democracia es un abuso de la estadìstica".
ReplyDeleteEmma Peel
Creo que es indudable que existe una enorme correlación entre las sociedades y sus dirigentes.
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