Hay claramente dos posibilidades: a) el argentino es un pueblo maravilloso con la increíble mala suerte de que siempre llegan los peores al poder o b) los que llegan al poder son un fiel reflejo de los valores, anhelos y proyectos del pueblo argentino.
Argentina está sistemáticamente entre los países más corruptos del mundo, pero los argentinos son mayoritariamente honestos.
Argentina tiene una organización sindical y política de neto corte corporativista fascista casi ininterrumpidamente desde hace unos 60-70 años, pero los argentinos son mayoritariamente partidarios de la democracia liberal.
Argentina bate récords internacionales de inestabilidad política desde por lo menos 1930, con diversos golpes de estado y recambios presidenciales adelantados, pero los argentinos son mayoritariamente respetuosos de las instituciones republicanas.
Argentina tiene una lamentable tradición de violencia política y violaciones a los derechos humanos, pero los argentinos son mayoritariamente derechos y humanos.
Podría seguir, pero creo que se dan una idea.
Fuera de joda, qué suerte de merda.
Dicen por ahí que los pueblos tienen los gobiernos que se merecen.
ReplyDeleteEn el caso Argentina... ¿no será que además, los gobiernos tienen los pueblos que se merecen?
meg@radio
te olvidas que ademas , dios es argentino.
ReplyDeleteTodo es culpa de la casualidad permanente, che.
ReplyDeleteGus VF
Espejito, espejito...
ReplyDeleteY todo eso pasó en nuestro tiempo de vida porque, insisto, la Argentina no fué siempre así.
ReplyDelete¿Casualidad, comodidad, conformismo, resignación, impotencia, incapacidad de transmitir ideas, timidez, cobardía, simple aprovechamiento de la ventajita personal por parte de la mayoría de la población?
Y la gente liberal preparada y leída, ¿dónde anduvo todo ese tiempo? Sé que en este blog hubo muchos que formaron parte de la UceDé y no han traicionado el ideario liberal que los motivó a militar, así que la pregunta es retórica. Pero, ¿dónde andaba el resto?
Nada es casualidad, todo tiene causa.