Porque a) siempre se puede estar peor y b) nada ni nadie te puede garantizar el éxito en la vida:
Suele oírse que la realidad marca los límites e impone las correcciones, pero no necesariamente siempre es así. La decadencia es una sombra que amenaza a sociedades que equivocan su rumbo pero que quedan condicionadas a liderazgos construidos sobre bases populistas o con ideologías administradas por gobiernos que abusan de la educación pública y del control de los medios.
Los países que funcionan no se hicieron a los besos y abrazos. Igual lo que está mal en Argentina es la cabeza de la gente, y en particular, quizá lo que tenga más peso, la cabeza de la mayoría de las élites (empresarios, sindicalistas, políticos, intelectuales, periodistas, etc). Todos navegando en el denso mar del pedorrismo nacionalista-pobrista-tercermundista de la dignidad e independencia. Casualmente para hacernos independientes de "lo yanki", las multinacionales, "el capital concentrado"... nos hacen esclavos del Estado.
ReplyDeleteCoño, no se si llorar ahora o esperar a que llegue mi mujer así tengo un hombro comprensivo. Lo que más me saca es que hay gente que le cree y cuando uno le pregunta que le cree, no te saben decir. Faltaría en ese decálogo impecable, la "religionización" de la política y la conversión a deidad indiscutible de quien toma la palabra (en todo sentido de la palabra, la toma, la agarra, la coje, se la queda, dejo al otro sin palabra y como no habla no existe) y esa palabra se convierte en ley, en algo grabado en piedra que las generaciones futuras deberían imitar ... Que miedo me da mi país.
ReplyDeleteGabuch