Oct 25, 2012

Arruinados por una idea

Algunas cosas parecen nunca cambiar

Muchos piensan y dicen que el kirchnerismo consiste sólo de una banda de ladrones que se mantienen en el poder prepoteando y regalando sostenidos en una era histórica de abundancia, que no tienen ideas y que todo dejan sojuzgado a la permanencia en el poder.

Si bien esta afirmación no se halla lejos de la realidad, me permito disentir.

No pienso, no me atrevo a argüir, que no son ladrones ni que no se mantengan en el poder prepoteando y regalando sino a que no hay ideas detrás de este mamarracho abrazado con bastante pasión por el pueblo argentino.

Hoy leo en La Nación (alias Pravda) que la agrupación kirchnerista La GraN MaKro (no podían ser otra cosa con ese nombre) ha publicado un listado de las "20 verdades" para entender y defender el modelo, haciendo un parangón de las "veinte verdades peronistas" que nos legara el Gran Pastor.

Por más que todo lo expresado dentro de las "20 verdades" no sea más que una combinación de estadísticas truchadas, verdades a medias, incoherencias contradictorias y mentiras descaradas, sin dudas se puede extraer de ellas las ideas que desde hace doscientos años (y más), con brevísimas interrupciones, han condenado a la Argentina al atraso, la pobreza, la violencia, la falta de libertad y al repetido fracaso.

Son las ideas de la cerrazón, sustentadas en el siglo XX por la tésis Prebisch-Singer del deterioro progresivo de los términos de intercambio.

Detrás de esta tésis y sus infinitos sucedáneos se han encolumnado todos aquellos que desde los realistas, el monstruo Rosas y luego los peronistas-nazionalistas que prevalecen hoy, odian a todo lo que provenga desde fuera de nuestras fronteras, creen que nada tenemos para ganar en el libre intercambio de ideas y mercaderías, creen que somos superiores a las demás naciones del mundo y que cualquier tipo de apertura nos debilita. Creen que los anglosajones han pergeñado hace siglos una gran conspiración para evitar que lleguemos a nuestro "merecido" puesto de preponderancia en el mundo.

Creen que la única forma de progreso pasa por sostener una industria ridícula que requiere de infinitas protecciones y subsidios, que incluso, en casi todos sus casos, se trata de galpones en donde se arman como piezas de Meccano (o más bien Lego) las partes fabricadas allende los mares cuando, hoy por hoy, las naciones en las que predomina la industria distan de ser las más avanzadas.

Creen que la extraordinaria productividad agropecuaria argentina no es nada más que el combustible de una industria que, sin importar los subsidios y protecciones que se le otorguen (y seguramente debido a éstos) nunca asoma la nariz sobre la superficie.

Creen que las inversiones extranjeras no son más que colonialismo disfrazado, que no es necesaria la inversión para elevar el nivel de vida de la población, creen que debe ser el estado nacional el que debe velar en forma exclusiva por el bienestar de la sociedad, creen que la economía es un juego de suma cero; que para que unos ganen, otros tienen que perder.

Creen que la libertad no es más que una concesión del estado nacional y su momentáneo "conductor".

Bien sabemos que todas estas ideas han fracasado en todo el mundo, en particular en el siglo XX, y las naciones que progresan las han ido abandonando.

El error pasa por considerar que, una vez que hayamos derrotado (o se hayan ido con la cola entre las patas) a los peronistas ladrones de turno, el problema central de la Argentina quedará resuelto y arribará una era de progreso y prosperidad.


El monstruo que nos devora las entrañas

Nada más lejano a la verdad, el peronismo, versión del siglo XX de las ideas de una argentina cerrada y recelosa, es una poderosa hidra que regenera dos cabezas por cada una que se le corta.

Derrotar a la hidra argentina, al igual que a la mitología, será tarea hercúlea y, como viene la mano, me parece que la hidra se va a morir de vieja o por una guerra entre sus cabezas.

El equívoco de creer que la muerte de la cabeza hoy preponderante de la hidra representa la muerte del monstruo es tan grande como el de creer que el camino al progreso de la Argentina pasa por la cerrazón y la negación de la libertad.

13 comments:

  1. Me sacaste las palabras de la boca - JUAN

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  2. Muy bueno, Blogo. Ojalá esta postura ante la vida se limitara al peronismo y los peronistas.

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  3. Comparto plenamente.
    Lo triste es que la única salida a esta encerrona debería ser Ezeiza.

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  4. Impecable, Blogovido!

    Ésa es la visión de largo alcance con la que tanto insisto por acá, no quedarnos con la hipnótica indignación que nos provoca una de las cabezas de la hidra, sino ver concientemente a la hidra en su totalidad histórica y real.

    Recién acabo de poner un comentario en otro post que me atrevo a repetir aquí porque me parece que puede ser complementario en éste:

    El peronismo es muy hábil y, al contrario de lo que generalmente se cree, planifica. Cuando las papas queman y el derrumbe es inevitable, “cede” graciosamente el Poder Ejecutivo, reservándose el lugar de implacable oposición. Binner es el gran candidato para esa ocasión, el de la Rúa progre que pagará los costos. Entonces volverá “el auténtico peronismo” a administrar una decadencia cada vez más profunda –la capacidad de adaptación a ella es casi infinita en el ser humano, especialmente en el Homo Alpargatiensis- sostenida en la magia circunstancial de algún nuevo tipo de populismo, de derechas probablemente.

    De ese perverso círculo nunca salió la Argentina en los últimos 70 años, realimentándose sobre dos pilares: el de los irrecuperables sumisos prebendarios y el de los asustados, conformistas y funcionales que apoyan haciendo “tripas corazón” en lo que no es más que una interna peronista

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  5. Si me permite, le pondré a la hidra un nombre más operativo para mi: Colectivismo, juego de suma cero, lucha de clases, dialéctica de Amo-Esclavo. El ancestral afán y recurso de algunos -los psicópatas- para gobernar a los demás, como si fueran "cosas" que existen para su propio beneficio. Algunos lo llaman "Política" y hasta hacen una profesión de élla.

    El resultado fue la creación de algunas "instituciones" que se han erigido en tabúes, indiscutidos en su esencia y en su necesidad para la vida social.

    Una de ellas es, como dije, es la misma "Política". ¿Realmente necesitamos esa casta de parásitos profesionales que se comportan como amos de nuestras vidas y viviendo a nuestra costa por toda su vida?

    Otra es el sindicalismo corporativo que incocebiblemente convive con una economía del 50% en negro no sindicalizada. ¿Realmente sirven para algo, salvo para que el 50% sindicalizado -en sociedad con la "Política"- viva por encima de su contribución de valor a la sociedad y a costa del otro 50%?

    Otros son los empresarios prebendarios, que sólo existen por los privilegios obtenidos de su sociedad con "la Política".

    En la medida que no tomemos conciencia de la realidad, haciéndonos esas preguntas, no podremos dar el paso evolutivo hacia el individualismo, el juego de suma positiva, la creación de valor, la libertad, la prosperidad, la paz, la convivencia. Seguiremos viviendo bajo el "Antiguo Régimen". Recordemos que el individualismo(derechos individuales), que nosotros en este blog tanto valoramos, fue consecuencia de la tolerancia recíproca fruto del cansancio por tanta guerra, miseria, enfermedades que son la consecuencia lógica y fáctica del Colectivismo. El colectivismo, lejos de crear riqueza, la destruye. Está demostrado.

    La tolerancia significa considerar al otro como auténtico otro y no una "cosa" que está a nuestro servicio, es fruto de la educación y el desarrollo del pensamiento conceptual.

    Un pueblo que en su extensa mayoría está sumido en la subsistencia y sin expectativa de salir de élla, no puede ser libre. Sólo cuando la libertad económica permite salir de la subsistencia, con el AHORRO INDIVIDUAL, puede haber LIBERTAD.

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    1. Coincido, don Pero. Alguien que ahora no recuerdo (perdón… bueno, no sé si no fue Ud. mismo don Pero) ya puso por aquí esta frase de Rothbard que me parece oportuno repetir:

      “En efecto, si la mayor parte de la población estuviera convencida realmente de la ilegitimidad del Estado, si es que estuvieran convencidos de que el Estado no es más ni menos que un grupo de bandidos extendido, entonces el Estado pronto se derrumbaría y pasaría a dejar de existir como cualquier otra pandilla o Mafia. De ahí la necesidad del Estado de emplear ideólogos, y de ahí la necesidad de la antigua alianza del Estado con la Corte de Intelectuales que tejen la apología de la norma estatal.”

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    2. Afortunadamente no fui yo el que posteó ese párrafo de Rothbard Gus VF, porque lo suscribo totalmente.

      El genial Borges decía: "Algún día mereceremos no ser gobernados". También describía a los peronistas alfa como "incorregibles". Lo que no dijo, esto lo digo yo, y me hago cargo, es que "incorregible" es una característica de las personalidades con trastornos antisociales, los psicópatas.

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  6. Ay Blogo, me garcaste la tarde, encima un conocido mío que está en Europa me dice que es todo sanata lo de la crisis y que está todo pipí cucú allá.

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  7. De acuerdo.

    Pero no tenemos que perder de vista que estamos "aguantando" y que el embate es de ellos.
    En estos momentos sacarse a 'la hidra' (de bruta) de encima es frenar el embate que nos viene a arrasar.
    No hacerlo es suicida.
    Después se irá avanzando. Si se puede.

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  8. Igual quiero destacar que la idea principal que nos mantiene en esta era de retraso es la del industrialismo. Si nos fijamos bien, todos los atropellos y salvajadas que se cometen tienen como última base y justificación el "desarrollo de la industria".

    La principales instituciones que nos oprimen son el BCRA y la aduana.

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    1. El industrialismo como excusa(mito) para restaurar privilegios feudales. A eso, los psicópatas lo llaman "hacer política".

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    2. El 99% de los argentinos cree de no apoyarse fuertemente la industrias y de no restringirse fuertemente las importaciones, la Argentina sería una estancia con 100 patrones y cuarenta millones de siervos.

      Hasta que los argentinos no nos saquemos esa noción extraordinariamente equivocada de la cabeza, vamos a seguir siendo un país atrasado y pobre.

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  9. Muy bueno todo, texto y comments, Blogovido.

    Pato Criollo

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