El Opinador Compulsivo

Yo me sumé tarde a la protesta porque salí de cursar italiano a eso de las 22:30. Pero, a diferencia del 13/9, lo que me sorprendió fue que en el Obelisco hubo mucha gente a esa hora.

Una vez más les cabió a los kretinos y no lo entenderán. Les dieron a elegir entre el deshonor y la guerra. Eligieron el deshonor y ya tienen la guerra.

Tuvieron la oportunidad de rectificar. Eligieron ir por todo y ahora irán por ellos. Les saltarán a la yugular y estoy convencido de que pronto veré pasar los cadáveres de mis enemigos.

Se creyeron que ser ladriprogre es sinónimo de intocable. Pero jamás entendieron que la gente a la larga se cansa de tantas gansadas e inmoralidad en nombre de la progresía y los derechos humanos.

Nos han mentido, basureado, dividido. Familias y amistades rotas por el odio irradiado desde el poder. Pero pronto serán ellos a quienes les llegará la hora de pagar por sus actos demenciales y cobardes. Y ojalá, que sea al estilo de los Ceaucescu.

Yo lo digo: no les tengo miedo, kretinos. No soy cobarde, como ustedes. No soy un sinvergüenza, como ustedes. No soy una basura humana, como ustedes.

Y a vos en particular, Kretina: ¡No te tengo miedo, ni respeto!

¡¡MI LIBERTAD Y MI INTEGRIDAD NO SE NEGOCIAN!! ¡¡SIN LIBERTAD, NADA ES POSIBLE!!

Andrés