Argentina es un país pobre porque su economía hace una asignación de recursos muy ineficiente

Es mucho más ineficiente que la de países vecinos como Uruguay, Brasil, ni hablar de Chile, y que la que tenía hace un poco más de una década.

Hasta ahora fue posible disimular en algo estas ineficiencias gracias a los términos de intercambio extremadamente favorables. Pero pretender seguir así indefinidamente deja al país atado a golpes de suerte y condena a los argentinos a no salir nunca del círculo vicioso de la pobreza y del atraso.

Si la idea es empezar a revertir esta situación no queda otra que, a un nivel muy elemental, volver a un sistema de precios para la mayoría de los sectores de la economía y, yendo un poco más lejos, la especialización y el comercio internacional.

Todo lo demás es perder el tiempo.