La culpa de todo lo que pasa en la Argentina la tiene la “convertibilidad”. Se nos decía que el atraso cambiario hacia que el país no sea competitivo, no pueda exportar, que el modelo favorecía a los servicios sobre la producción industrial (la VERDADERA producción). En las inmortales palabras de la doctora María América González, del Rinconcito de los Jubilados, se trataba de un “genocidio económico”.
La solución era devaluar. La Argentina era una prueba viviente de que las devaluaciones y las violaciones masivas a los contratos eran el camino al desarrollo. Había que liberar el tipo de cambio, dejarlo flotar, de esa manera íbamos a ver como aumentaban las exportaciones y la producción industrial.
Casi 5 años después, a pesar de todas las barbaridades que se dijeron y se siguen diciendo, el país vive en una pseudo convertibilidad de hecho. Aparentemente atar el peso al dólar no estaba tan mal, lo que si estaba mal era la relación de 10.000 australes por dólar. Parece que 30.000 australes por dólar es la fórmula mágica que nos va a permitir acceder al paraíso del desarrollo.
A esta situación de “convertibilidad trucha” no llegamos por virtud, sino por temor. Fue el manotazo de ahogado del superministro Lasaña, que comprendió a tiempo que la Argentina hace rato que perdió el privilegio de tener moneda propia. Digo a tiempo porque era muy probable que todo terminara en una nueva hiperinflación.
La Argentina no tiene moneda. Usamos unos papelitos de colores para las transacciones menores y de muy corto plazo, como comprar el diario o pagar el boleto del subte. Para todo lo demás, el dólar de EEUU reina supremo. No se trata de un acto de renuncia a la soberanía ni cipayismo, para usar términos tan caros a la mentalidad de ghetto argentina. Sencillamente nos cansamos de que nos estafen una y otra vez. Tal como volvió a pasar a partir del golpe a De la Rúa.
Me hace mucha gracia escuchar la preocupación de mucha gente por, y la naturalidad con la que hablan de, las reservas de dólares del Banco Central como respaldo del circulante. Parece que no aprendemos más. Esta misma gente es la que entre gallos y medianoche, sin que a nadie se le mueva un pelo, decidió que millones de argentinos iban a pasar a engrosar las filas de pobres e indigentes.
Todo sea para que la Argentina dé un fenomenal salto exportador de 29.000 millones de dólares en los últimos años de la vigencia de la convertibilidad a aproximadamente 35.000 millones ahora, un aumento de 6.000 millones en 5 años. ¡Impresionante! O para que se instaure el “modelo productivo”, que como su nombre lo indica, se caracteriza por producir mucho menos que antes. Todavía estamos por debajo de los máximos de producción industrial en el mejor año de la “convertibilidad”.
Pero el sacrificio valió la pena. Si todo sale bien, este año habremos alcanzado el PBI de 1998, medido en pesos. Un detalle menor. En dólares, no, seamos serios. Y según estimaciones del propio gobierno, si todo sale muy, pero muy bien, y el país sigue creciendo al 8% anual, para el año 2014 habremos recuperado el PBI per cápita de… la Argentina de 1998.
Si esto no es ser unos vivos bárbaros, la verdad es que no se qué es.
Luis esta fea fea la cosa.
ReplyDeleteY pensar que esto lo habíamos hablado hace unos once meses atrás.
Tengo el presentimiento que las minis devaluaciones que se empezaran a dar para equilibrar el balance del central, alimentarán a un más el rush inflacionario.
Sí con un escenario estático de precios nominales para el billete, tuvimos tres meses muy feo del IPC, con el peso devaluándose cinco o seis por ciento, no me imagino.
Una noticia tapa la otra. Quizás mañana ya empiecen a olvidarse, pero en febrero del año que viene, acuérdate de lo que escribiste y comentamos en la blogs..
Nos fueron acostumbrando a todo, incluso a convivir con la tercera inflación mas alta del mundo.
Y tanto vos como yo sabemos que esto no se sostiene mucho tiempo. No hay maquina que aguante con dos o tres años con una inflación de dos dígitos.
Aunque esto ya lo sabíamos desde hace mucho, creo que con esta noticia el final puede adelantarse.
Buenas Tardes,