Johan Norberg sobre las nacionalizaciones en Bolivia (hablo en plural porque esto recién empieza):
HERE WE GO AGAIN:
Evo Morales´ socialisation of the natural gas companies will make Bolivians rich he says. It´s not the first time Bolivian leaders say and do that, this is the third socialisation in 70 years. Every time companies begin to invest in technology and knowhow, the government punishes them and change all the terms. 70 years ago, Bolivia was almost as rich as Spain. Today Spain is about seven times richer.
Here is Mario Vargas Llosa´s classical explanation of the problem, when he talked about his own Peru:
"In France, Sweden, or England, a public enterprise maintains a certain autonomy in relation to those who hold political power: it belongs to the state; and its administration, its personnel, and its functioning are more or less safe from the abuse of governmental power. But in an underdeveloped country, exactly as in a totalitarian one, the government is the state and those in power oversee it as though it were their own private property, or, rather , their spoils. Public enterprises are useful for providing cushy jobs for the protégés of those in power, for feeding the people under patronage, and for making shady deals. Such enterprises soon turn into bureaucratic swarms paralyzed by the corruption and inefficiency introduced into them by politics. There is no danger that they will go broke; almost always they are monopolies protected against competition and their life is guaranteed indefinetly thanks to subsidies, that is to say, the taxpayer´s money." (A Fish in the Water, 1994)
Un petit comentario, si me permiten. Norberg sostiene que los bolivianos son sólo 7 veces más pobres que los españoles. Deben estar saltando en una pata.
Me parece medio fruta ese dato de que alguna vez bolivia haya sido tan rico como españa. Y si ese "alguna vez" fue hace 70 años, era en plena guerra civil.
ReplyDeleteEs como si tomaras como parámetro la riqueza de algunas islas de indonesia después del Tsunami (el natural, no el progresista, que sí cuenta).
Dado que se han dicho muchas pabadas acerca de la nacionalizacion del gas en Bolivia, sugiero este interesante articulo escrito por un politologo canadiense. Lo que si, es un poco elevado, asi que "cogitos argentums" y "sine metus" abstenerse
ReplyDeletehttp://www.zmag.org/content/showarticle.cfm?SectionID=52&ItemID=10202
Ahora que los hidrocarburos y el gas vuelven al Estado boliviano, voy a hacer estas preguntas:
ReplyDelete-Una vez nacionalizados, ¿Serán propiedad de todos los bolivianos? NO, pero de unos pocos bolivianos sí: políticos, sindicalistas, empresarios corruptos, etc.
-¿Será el Estado capaz de garantizar que haya más inversiones? No, porque EL ESTADO ES UN PÉSIMO EMPRESARIO. Con eso está todo dicho de antemano.
-¿Por qué la mayoría de los bolivianos, en un país que tiene la segunda reserva gasífera de Sudamérica, no puede acceder a tener gas natural?
*Primera razón: no tienen con que pagarlo. A no ser que se pretenda que todos reciban servicio de gas natural gratis, total alguien lo paga: los mismos bolivianos que no pueden tener ese servicio mediante impuestos.
*Segunda razón: en caso de que el gas natural sea 100% del Estado, para éste lo que se llama MERCADO no existe. No le interesa el hecho de tener nuevos clientes.
¿Fuí claro con lo que dije, Luis?
Cristian, No hace falta ser un experto internacional ni hacer futurología para saber cómo termina todo esto. Sólo hace falta revisar un poco la historia reciente de la región. No tiene absolutamente nada de novedoso. Se trata de la vuelta a los mismos vicios de toda la vida.
ReplyDeleteTal vez lo más llamativo sea que tanta gente se vuelva a entusiasmar con estos disparates. Una vez más, la idea parece ser que las experiencias del pasado no importan. Esta vez sale bien. Una vez más, me hace pensar que se trata de una cuestión cultural. Una especie de tara que llevamos con nosotros y se transmite de generación en generación.
Andrés, lamentablemente es así. Si el camino al desarrollo fuera la propiedad estatal de los medios de producción, Latinoamérica sería la región más próspera del planeta. Insisto, ya hemos visto esto tantas veces en el pasado que sorprende que volvamos a poner en práctica las mismas locuras esperando resultados distintos.
ReplyDeleteEn fin, parece que cada tantos años hace falta volver a explicar estas cosas para las nuevas generaciones de psicobolches.
Luis, me parece buena idea remitirnos al pasado. Tomemos, por ejemplo, el caso de YPF en los anios del General Mosconi. En esa epoca la empresa era estatal y funcionaba muy bien. Contrariamente a lo que el discurso privatista dice, ahi se demostro que una empresa manejada por el estado puede ser eficiente y dar ganancias. Para mas informacion, ver el documental "Memorias del saqueo"
ReplyDeleteSaludos,
Cristian
Tal vez Norberg está considerando el verdadero valor de la economía española: aproximadamente 600 mil millones de dólares, que nos da 15 mil dólares per cápita. Ya que se considera que la renta por habitante de Bolivia es de unos 2 mil dólares, la de España sería 7.5 veces más grande. En todo caso, Bolivia nunca fue tan rico como España, ni durante la Guerra Civil ni en ningún otro período. De hecho, la historia económica latinoamericana es tan miserable, que ninguna ex-colonia española ha sido nunca más rica que la empobrecida madre patria, con la notable excepción de Argentina.
ReplyDeletePara Cristián: es "pavadas" con V de vaca y no B de bocón. Viene de pavo. Y la revista "Z" no es una publicación seria en absoluto: de extrema izquierda y paranoica, hace que "Granma" de Cuba parezca un medio responsable y profesional. Busca mejores fuentes para la próxima, si de "artículos elevados" se trata.
Sergio, no me habia dado cuenta de que "pabadas" estaba mal escrito. Gracias por avisarme. Con respecto a Zmag, dos cosas: una, que me que parece que decir que es de izquierda, derecha o lo que sea no es un buen argumento para descartar un sitio. En todo caso habria que decir por que te parece que es malo. Dos, que Zmag es uno de los mejores sitios que tiene la izquierda. Gente de primer nivel escribe ahi y lo consultan en todo el mundo. Asi que independientemente de la ideologia a la que uno pertenece, me parece que es una buena fuente.
ReplyDeleteEmpresas estatales eficientes:
ReplyDelete-Entel: Tardaba veinte años en instalarte un teléfono. Las casas con teléfono se cotizaban el doble de las que no lo tenían.
-Segba: Los apagones programados en la época de Alfonsín me relevan de todo comentario...
-YPF: Si era tan eficiente, no se explica porque la Argentina dejó de ser importador neto de petróleo recién cuando el gobierno de Frondizi permitió la inversión privada en extracción petrolera... Me olvidaba de las colas para cargar nafta en la época del buen Alfonso...
-Ferrocarriles Argentinos: Casi no tuvo inversión desde que se nacionalizó la empresa en tiempos de Perón, el servicio se fue deteriorando paulatinamente hasta que fue privatizado... Es cierto que la privatización no fue muy buena, probablemente porque se congelaron las tarifas y la rentabilidad de las empresas no dependía de la mejora del servicio sino de los subsidios estatales... Asi y todo durante los primeros años de la privatización, los trenes interurbanos empezaron a ser puntuales...
¿Alguien puede seguir creyendo en la estupidez del estatismo?
¿Porque el Estado debe quitarme mediante impuestos lo que no estoy dispuesto a pagar mediante tarifas?
Debo admitir que me resulta muy tedioso tener que seguir explicando estas cosas. Quiero creer que Cristian y V son demasiado jóvenes y no se acuerdan de lo que eran las empresas públicas en la Argentina.
ReplyDeleteComo vengo diciendo por acá, en la Argentina las empresas de servicios públicos se entregaron en concesión mucho más por necesidad que por virtud. Más que de un prurito ideológico se trató de un mecanismo de supervivencia. Había que evitar el colapso total de la infraestructura que ya se había llevado puesto a un presidente. YPF no fue una excepción.
YPF perdía cientos de millones de dólares por año con una facturación de unos 1500 millones en el mismo periodo. Como el resto de las empresas estatales, operaba sin presupuesto, sin balance y sin inventarios. No se sabía a ciencia cierta ni la cantidad de pozos, ni las cifras de producción, ni las áreas exploradas, ni las reservas, ni el material con el que contaba. Tenía más del doble de los empleados que realmente hacían falta y no cumplía ni remotamente con sus funciones básicas.
El estado argentino, a través de YPF, se reservaba enormes sectores para la exploración y explotación petrolera. Y no los aprovechaba por no tener los recursos ni la tecnología. El perro del hortelano, no comía ni dejaba comer.
A partir de la desregulación del sector petróleo y energético en los 90, que incluyó su privatización, esta situación cambio dramáticamente. Creo que se trató de uno de las áreas en que el contraste fue más marcado. A los pocos años de pasar a manos privadas, YPF triplicó su facturación con menos de la mitad de los empleados. Hubo enormes mejoras en la calidad de los productos, en la productividad general, en las áreas exploradas, productividad por pozo, reservas, incorporación de tecnología, manejo de información, etc. A los pocos años, el país dejó de ser importador de petróleo y derivados para pasar a ser exportador neto.
Sólo se puede hablar de la supuesta eficiencia de la compañía en sus primeros años de existencia en contraste con lo que pasó después. En todos los países del mundo la productividad promedio del sector público es menor que la del privado. Una empresa estatal en un país de productividad alta, como Canadá, tiene una productividad mucho más alta que la del promedio argentino, incluyendo al sector privado. Pero es menos productiva que el sector privado de Canadá.
V sostiene que:
1) Los sectores estratégicos de un país deben estar en manos del estado.
2) YPF no perdía plata, es un invento de los “privatistas”, y que fue saqueada por los militares ladrones y, por supuesto, por Menem.
Cuanto más estratégica, mayores son los incentivos para ser eficientes en esa área. Por lo tanto, mayores son los incentivos para que estén en manos privadas. La existencia de empresas estatales en este sector responde mucho más a cuestiones políticas que económicas o de uso eficiente de recursos.
Los que saqueaban YPF todos los días eran sus propios empleados y proveedores, incluyendo a los directivos. Los sueldos promedios eran más altos que el promedio del sector y recibían beneficios leoninos en detrimento de los ingresos de la compañía. La corrupción era galopante y los robos de material de la empresa eran de todos los días.
De todos modos, el hecho de que una empresa pública pierda o no plata no es el principal motivo por el que debe pasar a manos privadas. El estado argentino no tiene, ni en ese momento ni ahora, los fondos para mantener el nivel de inversiones que hace falta en el sector. Este problema es común a la gran mayoría de las empresas públicas en el tercer mundo. En este momento, a pesar del record del precio del barril, Venezuela invierte menos de la mitad de lo que hace falta para mantener la producción a los niveles actuales. Algo similar se puede decir de las compañías petroleras estatales de Brasil, México y Ecuador. Venezuela, México y Ecuador son exportadores de petróleo A PESAR de sus compañías estatales, no gracias a ellas.
Insisto, la nueva movida estatista de la región responde mucho más a cuestiones irracionales, de ideología o culturales, que a un proceso de evaluación racional de costos y beneficios.
Luis, mirá que detalle:
ReplyDeleteLuego de que se privatizara YPF, las estaciones de servicio de esa compañía cambiaron radicalmente de aspecto y hoy en día da gusto estar en cualquier estación de servicio de YPF.
A los que son más grandes (25 años para arriba), ¿Se acuerdan como eran las estaciones de servicio de la YPF estatal? Pregunto para saber.
Andrés, justamente de eso me acordaba cuando escribía el comentario. De terror.
ReplyDeleteLeo en este debate muchos ejemplos de empresas estatales argentinas ineficientes (YPF, Ferrocarriles, etc.) Yo estoy de acuerdo en que todas esas empresas en el momento de privatizarse eran ineficientes, tenian perdidas, eran burocraticas y andaban mal. Eso es innegable. Pero el punto no es ese. El punto es mostrar que una empresa, a pesar de ser estatal, puede funcionar bien. Esta lleno de ejemplos de esto: YPF en la epoca de Mosconi, los ferrocarriles suizos, las petroleras mexicanas, brasileras y venezolanas, etc etc.
ReplyDeleteDel hecho de que algunas empresas estatales funcionen mal no se deduce que hay que hacerlas privadas. Se deduce simplemente que hay que hacerlas funcionar como corresponde.
Luis dice que las empresas privadas en el mundo tienen mas "productividad". Esto tambien es innegable. Dado que una empresa se maneja con la logica del maximo beneficio, va a tratar de producir lo maximo posible al menor costo y, por ende, va a ser mas productiva que el estado. El problema es que la ganancia que genera queda para la empresa, que generalmente traslada la renta que obtiene a otros paises.
En cambio, cuando una empresa es estatal, la renta queda en el pais y
usa la plata que obtiene para los gastos tipicos del estado (sueldos, obras, etc.) Me parece mejor esto que darle las ganancias a alguien que no le interesa que al pais le vaya bien. Otra ventaja de la empresa estatal eficiente es que la gente y los politicos pueden controlarla con mas facilidad. De todas formas admito que habria que ver caso por caso. Es posible que los telefonos no puedan ser administrados por el estado, pero creo que YPF seguramente si.
He aqui una cita interesante del Gral. Mosconi:
"Resulta inexplicable la existencia de ciudadanos que quieren enajenar nuestros depósitos de petróleo acordando concesiones de exploración y explotación al capital extranjero, para favorecer a éste con las crecidas ganancias que de tal actividad se obtiene, en lugar de reservar en absoluto tales beneficios para acrecentar el bienestar moral y material del pueblo argentino. Porque entregar nuestro petróleo es como entregar nuestra bandera"
Enrique Mosconi
Saludos,
Cristian
Cristian,
ReplyDeleteUnos comentarios:
1)
Leo en este debate muchos ejemplos de empresas estatales argentinas ineficientes (YPF, Ferrocarriles, etc.) Yo estoy de acuerdo en que todas esas empresas en el momento de privatizarse eran ineficientes, tenían perdidas, eran burocráticas y andaban mal. Eso es innegable. Pero el punto no es ese. El punto es mostrar que una empresa, a pesar de ser estatal, puede funcionar bien. Está lleno de ejemplos de esto: YPF en la época de Mosconi, los ferrocarriles suizos, las petroleras mexicanas, brasileras y venezolanas, etc etc.
Luis: Las petroleras estatales de México, Brasil y Venezuela constituyen ejemplos de libro de texto de como NO hay que administrar estas compañías. Justamente un perfecto contraejemplo a tu punto de que hay empresas estatales que funcionan bien.
2)
Del hecho de que algunas empresas estatales funcionen mal no se deduce que hay que hacerlas privadas. Se deduce simplemente que hay que hacerlas funcionar como corresponde.
Luis: No entiendo tu línea argumental, ¿cómo las haces funcionar como corresponde? No lo sé, tal vez insistiendo en el error, despilfarrando miles de millones de dólares durante décadas, enriqueciendo a toda una casta de delincuentes y forzando a los contribuyentes a pagar la festichola. Es un problema de incentivos. Nadie se preocupa en mejorar ni cuidar no lo que no le pertenece. Decir que algo es de todos es lo mismo que decir que no es de nadie.
3)
Luis dice que las empresas privadas en el mundo tienen más "productividad". Esto también es innegable. Dado que una empresa se maneja con la lógica del máximo beneficio, va a tratar de producir lo máximo posible al menor costo y, por ende, va a ser más productiva que el estado. El problema es que la ganancia que genera queda para la empresa, que generalmente traslada la renta que obtiene a otros países.
En cambio, cuando una empresa es estatal, la renta queda en el país y
usa la plata que obtiene para los gastos típicos del estado (sueldos, obras, etc.) Me parece mejor esto que darle las ganancias a alguien que no le interesa que al país le vaya bien.
Luis: Cristian, es justamente al revés. NUNCA el país recibió mayores beneficios que cuando YPF empezó a pagar impuestos y pagar regalías. De las permanentes transferencias del Tesoro para tapar el déficit operativo galopante, el estado argentino pasó a percibir miles de millones de dólares por año, sin contar los puestos de trabajo genuinos, directos e indirectos, que generaba la actividad. No entiendo qué tiene de malo que los accionistas de una empresa reciban parte de las ganancias. ¿O es preferible que las reparta Kirchner entre sus amigos?
4)
Otra ventaja de la empresa estatal eficiente es que la gente y los políticos pueden controlarla con más facilidad. De todas formas admito que habría que ver caso por caso. Es posible que los teléfonos no puedan ser administrados por el estado, pero creo que YPF seguramente si.
Luis: Cristian, es justamente al revés. El estado tiene serias dificultades para controlar a terceros y una absoluta incapacidad de controlarse a si mismo. Es un hecho en todas partes del mundo. Es mucho más probable que el estado pueda tener control regulatorio sobre los operadores privados de una actividad que sobre sí mismo. Por otro lado, en un mercado libre y sin restricciones de ingreso, una empresa privada que no hace bien las cosas o que no es eficiente simplemente desaparece.
5)
He aquí una cita interesante del Gral. Mosconi:
"Resulta inexplicable la existencia de ciudadanos que quieren enajenar nuestros depósitos de petróleo acordando concesiones de exploración y explotación al capital extranjero, para favorecer a éste con las crecidas ganancias que de tal actividad se obtiene, en lugar de reservar en absoluto tales beneficios para acrecentar el bienestar moral y material del pueblo argentino. Porque entregar nuestro petróleo es como entregar nuestra bandera"
Enrique Mosconi
Luis: Cristian, aunque nos duela, debemos admitir de una vez por todas que este discurso es parte de toda una tradición nacionalista nefasta que nos condenó a la pobreza y al atraso durante décadas. Hemos envenenado a generaciones de argentinos con el disparate de corte fascista de que el petróleo, el gas, la minería, los teléfonos, los trenes, el agua o la actividad que se te ocurra es la patria, la bandera, el himno y la escarapela. Desde mi punto de vista, la soberanía de un país pasa por otro lado. La verdadera pregunta que nos debemos hacer no es si en los primeros años de YPF era más eficiente que antes de privatizarla, sino cuanto más eficiente y productiva hubiera sido TODA la actividad si desde un principio hubiéramos aplicado los principios liberales de nuestra constitución.
Mis objeciones a la participación del estado en los medios de producción son de varios tipos. El estado tiene serias dificultades para brindar los servicios que se le atribuyen como propios: seguridad, educación y justicia. El fracaso es absoluto cuando se dedica a otras actividades. Esto es tanto más cierto y grave cuanto más baja es la productividad promedio de la economía, cuanto más pobre es un país.
Todo recurso que el estado invierta en alguna otra actividad necesariamente resta recursos para estas tres prestaciones básicas.