Se armó la discusión sobre como tratar el tema de la pobreza. Cristian, un comentarista que tiene siempre a mano los argumentos de la biblia progre-fashion (y quién anuncia el lanzamiento de su propio blog, pasá la dirección cuando lo tengas), cree que la Argentina debería seguir los pasos de Canadá para salir de la situación crítica en la que está.
Cristian, no es el modelo Canadá lo que venimos probando desde hace ya 60 años? Salvo desprolijos intentos de abandonar el sistema socialista-populista, nuestra historia reciente es un monumento al fracaso de la planeación estatal.
Qué propone esta gente? Cobrar más impuestos para que nuestra iluminada clase política solucione el problema de la desigualdad?
Veo al pie de los comentarios un link al blog de Marcos en el que también se refiere a este post. Lo leí varias veces. Después me di cuenta porqué hace mucho tiempo no entro a su blog. Sus intrincadas elaboraciones intelectuales (en inglés se traduce “absurdly pointless”) exceden mi capacidad intelectual. No entiendo lo que quiere decir. Alguien me explica? No estoy a su nivel.
lamentable lugar común que veo en la discusión:
ReplyDelete"vos sos pobre => no opines"
por otro lado muchos plantean que los sistemas de bienestar reducen la pobreza. yo creo que estos sistemas crean una "riqueza" ficticia. mucha gente y sectores reciben subsidios directos o indirectos que van contra la noción de esfuerzo personal. creo que estos sistemas no son sustentables en el mundo actual.
Me esta empezando a gustar este Ramiro. The Dissident Frogman en espanol!
ReplyDeleteLuis, disculpá, pero yo había sido quien hizo este post. A lo mejor tipeé mal el nombre, pero no quise pasarme por vos:
ReplyDeleteLuis, estoy 100% de acuerdo con la solución para los pobres: hay que eliminar los infames impuestos al trabajo (que no son otra cosa que robarle en forma disimulada al trabajador parte de su salario) y las "dignas" regulaciones laborales. Creo que si ello ocurriese, conjuntamente con la aplicación de medidas pro-mercado, mucha gente saldría de la pobreza.
Luis, otra cosa: he escuchado que en Argentina hay muchos hombres jóvenes que no estudian ni trabajan. Al margen de que a algunos de este grupo de personas les guste la vagancia, yo te pregunto: ¿Sería alto el número de personas que no estudian ni trabajan si el mercado laboral fuese desregulado y sin impuestos laborales?
Ojo, Luis, es probable que sea una pregunta de difícil respuesta. Pero la quise plantear.
Luis,
ReplyDeleteme voy a autocensurar, porque me pediste (mostrando un notable espiritu democratico) que no opine, asi que lamentablemente no te puedo contestar ni a vos ni a Beccar Varela ni a nadie. Siempre es mas comodo juntarse con los que piensan como uno, no?
Mi humilde colaboracion al debate:
ReplyDeletehttp://diletant.blogspot.com/2006/09/pobres-los-pobres.html
Qué feo debe ser que te digan pobre, que te señalen por ser pobre.
ReplyDeleteSiempre en mi familia estuvo el concepto de ser pobre, pero honrado.
Uno tiene lo que puede o lo que le dejan.
Cuando interviene el estado (gobierno) es seguro que solamente uno tendrá lo que le dejan.
Todo parece apuntar a que los pobres tienen la culpa de ser pobres, por eso el estado tiene que venir a sacarlos de la pobreza.
O a que los ricos tienen la culpa que los pobres sean pobres, por eso el estado tiene que venir a sacarle a los ricos para darle a los pobres.
Nunca se plantea que el estado es el culpable de la pobreza, con sus regulaciones, con sus trabas al trabajo, con sus confiscaciones impositivas.
Recuerdo un pequeño recuadrito en la revista Inc. de hace mucho tiempo que explicaba las alternativas de un pobre estadounidense marginal.
Comparaba el plan de negocios de un drug dealer con el plan de negocios de un negocio legal.
Existían tantas regulaciones que se debían cumplir que o el pibe era pobre o era un delincuente.
La culpa: del estado.
Prosecution rests.
Una buena frase que escuché una vez:
ReplyDelete"En Argentina el camino a Suecia siempre termina en Cuba"
Cristian, No me hagas sentir mal. No te prives de nada, mandame el link de tu blog pero segui comentando por acá si tienes ganas. A esta altura del partido ya sos como de la casa. Como esos parientes que no caen muy bien pero siempre se invita a las fiestas.
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