Oct 31, 2007
Soberanía gaseosa
Horror en Perú porque la Inca Kola, la gaseosa nacional, pasa a manos chilenas. ¡Horror de los horrores! Para que se den una idea, la Inca Kola es a Perú lo que la Bilz Secco a Santiago del Estero o la Torasso a Tucumán.
Hoy me llegó este mensaje:
Adiós Inca Kola
Amigos hay que solidarizarnos con todos los trabajadores de la ex- bebida de sabor nacional, consumamos otras bebidas, es una pena que nuevamente Chile nos quite algo!!! Ya no tomemos Inca Kola!!!!!!
No gastemos nuestros soles para los sueldos de los chilenos! Triste noticia, embotelladora Inca Kola se va a Chile
El comentario viene porque la Coca Cola ha decidido cerrar la fábrica de Surquillo en que se produce la esencia de la Inca Kola. En adelante, dicha esencia se fabricará en Chile porque allí les será más eficiente hacerla.
No cabe duda que la Coca Cola fabrica otras esencias en ese país y le resulta oneroso tener una planta separada en el Perú.
Hasta aquí la reflexión racional. Pero no vayamos tan rápido. No todo en la vida es razón ni es comercio.
Existe una sensación de pérdida en el ambiente. No solo de pérdida sino de frustración, despojo e impotencia. La Inca Kola hace tiempo que se convirtió en una bebida emblemática del Perú. Cuando menos así nos lo hicieron creer las campañas publicitarias y de concientización que sobre la bebida aquí se hicieron a través de los años. Inca Kola estaba insertada muy profundo en el sentimiento nacional. Hasta que a algún gringo racionalizador se le ocurrió desmantelar la planta de esencias y despacharla a Chile. Nada menos que a Chile.
A ver que le pareciera a ese gringo "racionalizador" que Kentucky Fried Chicken se vendiera a una empresa iraní, o la Coca Cola misma se fabricara en Cuba? La transacción parecería comercialmente legítima pero la reacción del pueblo norteamericano sería feroz. Que ese gringo vaya a explicarles su raciocinio a las 300 familias peruanas que está dejando sin empleo. Claro, la Coca Cola calma su conciencia enviando a esos empleados a recibir clases de Outplacement, un proceso para buscar trabajo. Mientras tanto 300 nuevos empleados chilenos celebran allá con Pisco.
Poco a poco y por acción de capitales judíos, los chilenos se meten más y más en el Perú. ¿Hasta cuando pues? No pido una irresponsable declaratoria de guerra pero sí un muro de Berlín al sur. Ustedes me entienden.
Que vaya tomando nota el insensible y bobalicón que ordenó colocar un busto de Prat en la mismísima Escuela Naval del Perú. Yo se que no es muy sensato todo esto, pero vaya a contarle sensateces al corazón. A partir de hoy no compraré más Inca Kola. Dejó de ser una bebida emblemática del Perú. Cuenten conmigo para el boicot. Algún día Inca Kola volverá a ser peruana???
AHORA DONDE QUEDA LA FAMOSA FRASE "LA BEBIDA DE SABOR NACIONAL" O "EL EMBLEMA DE FONDO DEL MAPA SI SE PRODUCE EN CHILE". . . SENTIMIENTO PERUANO DEBE OIRSE, REENVIEN ESTE EMAIL.
Qué quieren que les diga, no dejan de impresionarme estos arranques de nacionalismo xenófobo y racista que todavía afectan a tantas personas en la región.
Varias veces comenté por acá sobre el muy interesante fenómeno que se está dando en Perú desde hace unos años. Por primera vez en generaciones, la economía y las exportaciones crecen sostenidamente y empieza a surgir tímidamente una clase popular con alguna capacidad de consumo.
Este fenómeno está directamente relacionado a la inversión extranjera record que recibe el país. Esa inversión es en gran medida chilena. Los capitales chilenos no van a Perú a robarse sus riquezas, sencillamente porque Perú es un país pobre y no hay riquezas para robar, sino a ganar plata. Para ganar plata es necesario producir y generar puestos de trabajo.
Me cansé, que se jodan.
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Como cuando Quilmes pasó a manos brasileras, duelo nacional.
ReplyDeleteLa Gran Preocupación Argenta por los no problemas.
ReplyDeleteDel unánime NOOOOO mundial al bloqueo de cuba no hablan???
ReplyDeleteSon unos abombados!!!
Luis, por favor un poco más de Dignidad.
ReplyDeletePor qué no tocaste ese tema?
Anónimo, somos grandes. Vamos a ver si nos ponemos de acuerdo.
ReplyDeleteTeniendo en cuenta el eterno gataflorismo latinoamericano, resulta que si EEUU no nos lleva el apunte nos enojamos porque nos ignoran, no compran nuestros productos y sus inversiones no vienen a esta zona. Tal vez el ejemplo más representativo de esta actitud sea la permanente letanía de cuanto apologista de Castro en la región, aquello de que la culpa de los problemas de Cuba la tiene “el embargo”.
Si, al contrario, los norteamericanos nos consideran una prioridad, saltamos como leche hervida e inmediatamente salimos con aquello de "yankies go home", nos quieren explotar y llevarse nuestras riquezas y/o el agua.
Como buenas pendejas histéricas que somos, no hay poronga que nos venga bien.
esta bloqueada Cuba? pero si durante el 2006 el comercio cubano-americano fue de 800 millones de dolares, situandolo en el tercer puesto del comercio internacional que tiene la isla (#1 Venezuela, #2 China).
ReplyDeleteEl boludismo no tiene fronteras. Está en todas partes.
ReplyDeleteAnónimo:
Varias veces me referí al bloqueo a Cuba, y no precisamente tirándole flores a Washington. Y la próxima vez te referís a nosotros con más respeta, eh?
Tiene razón el peruano demente..., yo investigué el origen de los capitales que quieren reubicar la Inka Cola en Chile, y la pista termina en la prima de Halle Berry.
ReplyDeletePor que tenemos que perder tiempo con cretinos ?
OK, esto se refiere a Chile, así que meto mi cuchara.
ReplyDeleteMe pongo en el lugar del escritor peruano y casi lo entiendo. Su actitud, y la de muchos peruanos, es que si capitales extranjeros deben entrar al Perú, que no sean de Chile, y si la Coca-Cola tiene que llevarse la fábrica a otro lado, que sea a cualquier parte menos a Chile. Ya Perú armó gran lío gran por una fábrica de fideos chilena que se construyó en Lima (con coimas a Montesinos y videos, como en las películas de espías), a unos metros de 3M y de otra empresa estadounidense. Los vecinos alegaron que la planta chilena dañaba el ambiente de reserva natural del lugar (donde estaban al menos esas otras dos empresas y a cien metros de una autopista de cuatro carriles) y sacaron a los chilenos que les iban a matar a las aves y la flora. Ahora los de la Coca-Cola se largan con su bebida emblema para las tierras de los rotos ladrones, esos que saquearon Lima y se robaron todo y que ni siquiera pelearon la Guerra del Pacífico porque todo el mundo sabe que esa guerra la peleó y la ganó Inglaterra. A veces los mitos son lo único que le queda a la gente para poder soportar el diario vivir y el peso de la historia.
Honestamente no soy partidario de que empresarios chilenos pongan su dinero en países tan inseguros como Perú, Bolivia, o Argentina. Ya las inversiones billonarias chilenas en Argentina se fueron trasquiladas hace unos años (la pérdida se estimó en 3 mil millones de dólares de los 10 mil millones invertidos allende Los Andes) aunque tarados como Horst Paulmann todavía suspiran cuando Kirchner los insulta públicamente. El monto en Perú es de unos 5 mil millones de dólares. Tarde o temprano un revolcón nacionalista peruano y a quemar banderas chilenas (ya ha pasado en los tres países vecinos), a apedrear negocios de capitales sureños y a nacionalizar. La movida de Coca-Cola (capitales Yankees, horror!) tiene sentido de negocios inmediato, pero ignora las sensibilidades irracionales de un sector importante del Perú que aún quiere revancha por guerras pasadas y perdidas. Me gustaría poder reirme de la situación, pero es difícil. De acuerdo a un programa peruano de TV que vi en Youtube, cada seis meses cruzan a Chile 500 mil peruanos buscando trabajo; se quedan una semana, se vuelven unos días y cruzan de nuevo. La relación con nuestros vecinos es complicada. La irracionalidad está a la vuelta de la esquina: Bolivia prefiere no vender gas antes que venderlo por Chile, para que Chile no se beneficie también. Argentina prefiere no venderle gas a Chile y comprarle gas carísimo Bolivia. Y Perú se queja de todo: del límite terrestre, del límite marítimo, de los fideos, del pisco, del armamento chileno, del trato a los inmigrantes, del suspiro a la limeña, y ahora de una soda dulzona con gusto a chicle. Aunque parezca alarmista, si la cosa empeora seriamente en Argentina y no chorrea la prosperidad en Perú, más de uno va a mirar hacia el vecino y a descubrir que ahí hay un enemigo externo perfecto para distraer a la opinión pública y ganarle apoyo al gobierno de turno. En ese caso sí que nos va a ir lindo: todo el trabajo de décadas se puede ir por la borda.
Hay decisiones que pasan por sobre lo económico. Coincido con que la reacción chauvinista peruana es negativa, pero hay que tenerla en cuenta. Hubiese preferido que Coca-Cola dejara la Inka Cola tal cual como está y donde está. Si los vecinos nos detestan tanto, también deberíamos sacar nuestro dinero de donde no somos bienvenidos. Como ya antes alguien lo dijo: Que se jodan.
Sergio Flores
No te mueras nunca, Sergio.
ReplyDeleteSos reverenciado en este blog.
Y para el asnónimo que nos trata de abombados :
ReplyDeleteCuando en Cuba pueda haber BLOGUEO, vas a ver como desaparece el BLOQUEO.