Vacas sagradas

Muy relacionado con lo que vengo hablando por acá sobre la pobreza relativa de Québec en relación al resto de Canadá y de América del Norte.

Ayer recibí la última edición de L’actualité, una especie de revista Noticias quebeca, y les juro que casi me da un vahído de la impresión. Están desarrollando una serie de artículos sobre qué hacer para que la provincia levante cabeza y comience a acortar distancia con el resto del país y de la región. Pero nunca pensé encontrarme con algo tan fuerte.

Michel Audet, ex consejero político de André Boisclair, el ex líder del Parti Québécois, y de Bernard Landry, ex vice primer ministro de la provincia, se despacha con una lista de 15 ideas para un Québec fuerte. Entre ellas recomienda la legalización de un régimen de seguro de salud privado, para aliviar la presión sobre el público, la privatización del monopolio estatal de energía y la desregulación del sector, terminar con los controles de precios, terminar con la estabilidad laboral de los empleados públicos, la privatización del monopolio estatal del alcohol, una moratoria por diez años en la creación de programas sociales que no cuenten con autofinanciamiento y otras perlas más. El muchacho se define de izquierda, pero si estas son las propuestas de la izquierda, soy un zurdito enloquecido como el que más.

Se los digo desde ya, le van a prender fuego en plaza pública.