Me cuenta Rosenwasser que el desabastecimiento se siente muy poco en Santiago del Estero, salvo en leche y carne, que empezó en estos días.
Sí se nota fuerte en combustibles. Pero ese suministro hace por lo menos un año que está mal.
Y agrega crípticamente que “esta tía no llega a julio”.
Qué momento.
Dice Thompson que en Tucumán están empezando a sospechar que hay carne de caballo en las góndolas...
ReplyDeleteSí, ya no se consigue ni carne ni leche.
ReplyDeleteLa semana pasada compré una larga-vida y leche en polvo.
Que Thompson no se haga el fino que durante la hiper del 89 era de los que comían empanadas de gato.
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