Rapidito, que ando con mil cosas.
El viaje por Ontario sirvió para reafirmar lo que ya sabía (y temía). Aquello de la tremenda pobreza relativa de Québec. El contraste es muy marcado. Desde el estado de las rutas - destruidas en Québec, flamantes en Ontario -, pasando por el tamaño y la variedad de los negocios, el estado y amplitud de calles y veredas, la sensación generalizada es de una mayor prosperidad en lo de los vecinos angloparlantes.
Es impresionante, como entre Santa Fe y Santiago del Estero, apenas se cruza el límite entre las dos provincias el parche sobre parche de la autorruta 20 de Québec deja paso a la mesa de billar de la ruta 401 de Ontario. A unos 120 kilómetros de Toronto, los dos carriles por mano de la 401 se convierten en tres y la entrada a la ciudad es sobre cinco, con colectoras de dos por mano. Como contraste, a la entrada a Montreal la 20 se convierte en una avenida, con semáforos y cruces a nivel.
Por eso el innombrable eligió Toronto y vos Sherbroke
ReplyDeletey las minas? del otro lado, tienen tres tetas, o que?
ReplyDeletePero en Ontario no son solidarios ni fraternos. Sus lisas y ásperas rutas sólo conducen a la exclusión.
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