Como no podía ser de otra manera, los capitostes sindicales argentos enfurecidos por la decisión de ayer de la corte suprema.
Alguna vez le escuché decir a Ramos, el ex dueño de Ámbito Financiero, que toda desregulación sindical favorece al activismo sindical de izquierda. Según este periodista, muchos empresarios, fundidos por fundidos, preferían lidiar con la mafia de los gremios tradicionales, a quienes podían “comprar protección”, que con la intransigencia del fundamentalismo ideológico.
Yo estoy convencido de que en todos los ámbitos siempre es preferible mayor libertad a menor libertad.
Aparentemente todavía hay quienes no se han enterado de que la competencia siempre favorece a los consumidores.
No son de extrañar esas opiniones en un país tan liberticida como Argentina.
ReplyDeleteSí, los sindicalistas tradicionales peronistas son un lastre terrible, pero observemos un ejemplo de lo que es la alternativa, el sindicato de los subterráneos, que está peleado con la UTA, que por pavadas (despido de algún vago a ladrón) durante meses hicieron paros sorpresa.
ReplyDeleteY ahí los ves a los empleados, a los boleteros, que cierran la boletería por cualquier pavada cuando hay una cola de 30 personas, que trabajan 6 horas por día, que tienen aire acondicionado, a diferencia de los pasajeros y que cobran más de 1.000 dólares.
Los más jóvenes no deben recordar a los sindicatos SITAC-SITRAM de Villa Constitución conducidos por un gremialista llamado Agustín Tosco, que murió en 1975, a los 45 años de edad, de cáncer.
ReplyDeleteNo era peronista, él mismo se definía como marxista-socialista (algunos lo calificaban de troskista) y, creo, no era un corrupto sino un dirigente de izquierda dura y enemigo acérrimo de la llamada burocracia sindical, es decir, los hoy conocidos como "los gordos".
Los tuvo locos tanto a los empresarios como a los dirigentes sindicales peronistas.
Creo que el temor de los empresarios y de los gordos es que aparezcan tipos como Tosco o René Salamanca.
me haciste acordar de algo maxi. La subversion de los 70, no fue una lucha para implantar el marxismo en la Argentina, sino una lucha entre peronchos, que luchaban por el poder del control de los sindicatos. Los zurdos, gracias a Campora ingresaron al juego y se pudrio todo.
ReplyDeleteNo solo la ESMA "proceso" terrorista. En los hornos de la UOM, tambien.
Quizas esta decision de la corte obedezca al venerable principio politico de "divide y triunfaras".¿Sera la resultante final, un nuevo baño de sangre?.
Espero que no.