Mar 12, 2009

Alejandro Rozitchner retoma la cuestión de la pena de muerte en una columna en El Cronista.

Digo cuestión porque no me parece que se trate de un debate. Son los temas que se ponen de moda por algunas semanas después de que alguien más o menos famoso (o tristemente célebre) los lanza por el aire.

Yo insisto con que, lejos de ser un aporte para tratar de solucionar la explosión del crimen violento en el país, distrae y puede llegar a confundir. Si existe una solución, podemos estar seguros de que no pasa por la pena de muerte (con un sistema judicial como el argentino, no sé por qué creo que aún si se incluye la medida en el código penal, no se utilizaría nunca).

De todos modos, si es cierto aquello de que mucha gente necesita caer en la indignación para finalmente pasar a la acción, bienvenido sea.

2 comments:

  1. Yo creo que se confunde la pena de muerte con tener una política de seguridad que es lo que realmente hace falta.
    La pena de muerte es una lo que dice su palabra, una pena, una sanción determinada por un tribunal, no una política de seguridad.
    Por otro lado, ví algunos datos que dicen que en EEUU los estados en donde hay pena de muerte (no todos) tienen el mayor índice de delitos en el país.

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  2. Ni hace falta, alcanza con que los ladrones y asesinos salgan tras 20 años de la cárcel. Lo importante es sacarlos de las calles.

    Crímenes siempre van a haber, lo importante es que cuando atrapen a alguien que cometió un delito violento y/o cruel, lo retiren de circulación por mucho mucho tiempo, así evitamos que se repita ese delito.

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