No puedo dejar de pensar en el despilfarro de plata de los contribuyentes (debo ser un miserable), pero si se trata de aumentar el gasto público para inflar la economía, hubiera preferido toda la vida una nueva misión tripulada a la Luna en lugar de las distorsiones del “estímulo” obamista.
¿Obamista o onanista?
ReplyDeleteLas dos cosas.
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