Iba a poner esto como un comentario en el post de Ramiro sobre la decadencia de EEUU, pero mejor que quede como un post y que no se pierda por ahí.
Me gusta mucho el estilo con el que escribe Mark Steyn (ojalá tuviera yo ese comando, no ya del inglés, sino del castellano) y casi siempre estoy de acuerdo con lo que dice. Pero de todas las cosas que suele opinar, creo que en la que más da en el clavo es en su descripción de uno de los efectos más nocivos y más subestimados del avance del estado sobre la vida de las personas.
Steyn sostiene que llega un momento, como ya pasó en Europa y marginalmente en menor medida en Canadá, que se produce un cambio fundamental en la manera en que la gente de a pie se relaciona con el gobierno. Los adultos pasan a estar bajo la tutela de los funcionarios, que pasan a estar a cargo hasta de las decisiones más íntimas de las personas.
¿Puede pasar en EEUU también? No lo sé. Me encantaría pensar que no. Supongo que dependerá hasta dónde llegue el avance del estado sobre la vida privada del norteamericano promedio:
American exceptionalism would have to be awfully exceptional to suffer a similar expansion of government and not witness, in enough of the populace, the same descent into dependency and fatalism. As Europe demonstrates, a determined state can change the character of a people in the space of a generation or two.
Luis, de todos modos llegaste a decir que en Canadá, por más que tengan un Estado de Bienestar, el Estado canadiense (a diferencia de muchos países europeos) retrocede cuando ve que se mete más de lo debido en el sector privado. ¿Es cierto?
ReplyDeleteRespecto a Estados Unidos y el avance del Estado, creo que eso pasó durante el New Deal. ¿O no?
Andrés
Andrés, Yo creo que en Canadá en general el estado con los años ha avanzado demasiado sobre el sector privado y, lo que es más grave, sobre la vida privada de las personas. En Québec es particularmente serio.
ReplyDeletePor supuesto, al lado de lo que se vive en países como Argentina, es el paraíso. Sigo creyendo que la diferencia pasa por el piso de racionalidad sobre el que se mueven las sociedades.
Otro tema a tener en cuenta es el hecho de que con el grado de informalidad y desapego por la ley que hay en Argentina, todavía es posible escapar de muchas de las regulaciones, impuestos, trabas y demás. Acá el cumplimiento es prácticamente generalizado.
Luis, digamos que en EE.UU. y Canadá la diferencia la hacen sus propias sociedades a pesar del avance del Estado, ¿No?
ReplyDeleteAndrés