René Balestra en La Nación de hoy. Lo deben haber publicado por error:
La idea de una sociedad humana en la que la inmensa mayoría de las personas puedan tener caminos libres para edificar sus vidas no es un invento norteamericano. Es una aspiración milenaria que acompaña la existencia. Norteamérica es la primera, cronológicamente, que lo logra. Sin las ataduras de castas y capas sociales parásitas, lo ofrece como ejemplo desde el siglo XIX. Por eso, precisamente, Sarmiento busca inspiración allí y no en Europa, cuando quiere colaborar en la edificación argentina.
Che, ¡Qué desastre! Por favor, que le conteste Diament pronto.
ReplyDeletePara mi, en términos prácticos, es la "invención" de la libertad. Mientras los europeos hablaban y teorizaban, los norteamericanos fueron los primeros en materializarlo, y eso le duele a muchos.
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