Pensar qué fácil es pegarle al Papa:
Organizan un "gran beso" gay frente al Papa en Barcelona
Cientos de parejas homosexuales planean sorprender a Benedicto XVI cuando salga de la catedral de Barcelona, que visitará el próximo domingo
Y no se trata de defender a la jerarquía católica sino dejar de comerse los amagues de la izquierda hipócrita, mucho más preocupada por atacar todo lo que perciban como relacionado con la modernidad y Occidente que por defender los derechos de minorías.
Cuando organicen algo similar ante los mullahs en Irán o en Arabia Saudita me avisan y charlamos.
De acuerdo. Firmo al pie.
ReplyDeleteJL
La forma más barata de sentirse transgresor.
ReplyDeletejaja la otra vez le decía a mi vieja, muy católica ella que como ateo el Papa, para mi, tiene la misma autoridad moral que un chaman de una tribu del amazonas, y se ofendió,lo mismo pienso de los imanes, rabinos, lamas, fakires etc. Pasa que no encuentro musulmanes a quienes decírselo.
ReplyDeleteHacerse los cajetilla con los chochamus de los chalecos explosivos es otra cosa.
ReplyDeleteLouis, entiendo lo que decis, y un poco lo comparto, pero pensar asi es un poco de conserva.
ReplyDeleteEntiendo que es mas facil hacerselo al Potato que a los mullahs, etc. Pero mas vale tarde que nunca, enhorabuena que los putos pueden expresarse libremente.
En vez de decir "haganselo a los mullahs y si no, no se lo hagan a nadie", yo pensaria mejor: "Buenisimo lo de expresarse frente al Potato, y ojala pronto sea el dia en que no haya que temer por la vida de uno si se expresa enfrente del mullah..."
Queseyo.
Massa, a estos tipos los tiene absolutamente sin cuidado cuestiones como los derechos de los homosexuales o la igualdad entre hombres y mujeres. Sólo les interesan cuando se las pueden usar ideológicamente.
ReplyDeleteCuando les planteas por qué no condenan, por ejemplo, a los regímenes fundamentalistas islámicos por no garantizarlas te contestan que no seas etnocentrista, que se trata de diferencias culturales que hay que respetar.
Esa explicación justifica cualquier barbaridad pero, con el permanente doble discurso que los caracteriza, no aplica a la Iglesia Católica.
Si, acusan de medievales a los curas, pero apoyan regímenes que lapidan minas por adúlteras, "por que son sus costumbres" son una manga de hipócritas.
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