Hasta ahora, el revival populista inaugurado por Duhalde y continuado y potenciado por Kirchner y su esposa se había limitado a una fórmula más del fascismo clásico para el control estatal de los medios de producción.
En lugar de estatizaciones/nacionalizaciones lisas y llanas, como en la Venezuela actual o en otras épocas en Argentina, la cosa pasaba por el manejo real de las principales empresas del país - a través de controles de precios y tarifas, planes de inversiones obligatorios, licencias para exportar e importar, aumentos de salario por decreto, aprietes de sindicatos y demás grupos violentos mafiosos, y demás – sin tomar el control formal.
Aparentemente ahora volverán a las fuentes y las empresas pasarán directamente al ámbito del estado.
La gran pregunta - porque acá no hay modelo, proyecto ni plan sino improvisación permanente en base a la necesidad/calentura del momento – es si se limitarán a las empresas en las que tienen acciones o seguirán avanzando sobre, por ejemplo, los medios de comunicación, servicios públicos, comercio exterior y demás.
(Más del tema)
Chori inventó una palabra muy descriptiva de como termina ésto:
ReplyDeleteMetástasis populista.
Una vez que el ladrón entró a tu casa y te neutralizó a vos y a tu familia, lo único que te queda es rezar para que se vaya pronto y que respete tu vida y la de los tuyos.
La pregunta que debemos hacernos es:
¿Ya es hora de ponernos a rezar?
Es el parásito populista. Te robó, entró a tu casa y ahora se queda a vivir de arriba, protegido por su propia justicia.
ReplyDeleteMe hace muy mal leer los comentarios.
ReplyDelete"Bien dicho! Coincido en todo. Y cuan necesario es que algunos entiendan que la necesidad o no de un DNU queda a criterio de la presidente."
No se entiende, sinceramente no se entiende.
Si hacen esto es por desesperación, resentimiento o torpeza. Les va a explotar en las manos.
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